La incidencia del cambio climático en Chile se hizo palpable en los últimos días, con temperaturas heladas que impactaron con caída de nieve y lluvias en la zona norte, y afectaron la producción minera.
Aunque en teoría estamos todavía en otoño y oficialmente el 21 de junio comienza el invierno, el intenso frío tomó por sorpresa a la mayoría del país austral, y ahora de forma especial en la región minera por excelencia, Antofagasta.
La gobernación de Antofagasta informó que cayeron más de 15 milímetros de agua, y que alcanzarán los 25 milímetros en las horas siguientes, además de las nevadas, algo inusual en un área donde normalmente se dan dos milímetros de lluvia al año.
De acuerdo con la Corporación Nacional del Cobre (Codelco), mayor productora mundial del mineral rojizo, las divisiones (minas) del distrito norte del país determinaron aplicar varias medidas para preservar la seguridad de sus trabajadores.
En la ciudad de Calama fueron afectadas las faenas de las mineras Gaby, Chuquicamata, Radomiro Tomic y Ministro Hales.
También la minera privada Antofagasta Mineral señaló que trabaja de forma intermitente en sus yacimientos de Centinela y Zaldívar.
Las lluvias y la nieve obligaron a las autoridades de Antofagasta a decretar alerta roja, debido a cortes de carreteras, problemas en el suministro eléctrico, suspensión de clases, viviendas anegadas y cierre de pasos fronterizos.
La presidenta chilena, Michelle Bachelet, quien se encuentra en estos momentos en Estados Unidos, dijo en su cuenta de Twitter que «los equipos de emergencia han estado en constante labor por las lluvias en el Norte».
Santiago de Chile, 8 de junio 2017
Crónica Digital /PL