Las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos se efectuarán el martes 5 de noviembre de 2024. Joe Biden se postula para la reelección. Su predecesor Donald Trump, lo hace para un segundo mandato no consecutivo, algo solo logrado antes por Grover Cleveland. Otros aspirantes también han anunciado sus candidaturas para la nominación de los dos partidos principales. Por José R. Oro*, colaborador de Prensa Latina El ganador tomará posesión el 20 de enero de 2025. Además se renovará el 35 por ciento del Senado y el ciento por ciento de la Cámara de Representantes del Congreso. Varios estados celebrarán elecciones legislativas estatales y para gobernador. Antes de continuar, quisiera expresar queTrump y una parte de sus seguidores afirman que las elecciones de 2020 estuvieron amañadas en su contra. En mi opinión tienen razón en parte, ya que todas las elecciones en el capitalismo están conceptualmente “amañadas”, de una forma u otra, en nombre de los políticos que representan al poder económico, sean “demócratas” o “republicanos”, no contraTrump, quien es un preeminente “amañador” él mismo. Donald Trump y sus partidarios actúan contra Joe Biden, el Partido “Demócrata” y principalmente los sectores liberales y progresistas, tratando de obtener el monopolio de “amañar” las elecciones a su placer, o de tomar el poder por la violencia, como intentaran el 6 de enero del 2021 en el Capitolio de Washington, una sobresaliente muestra anti- democrática y de práctica fascista. Este “amañamiento” no se refiere al conteo de los votos, que puede ser bastante confiable, sino a estructuras que limitan el poder del pueblo. Un ejemplo entre muchos es el poder decisorio del así llamado Colegio Electoral. En las elecciones de 2016, Trump fue “electo” con casi tres millones (dos millones 868 mil 686) de votos menos que su rival Hillary Clinton, y en las de 2000, George W. Bush “ganó” con medio millón de votos menos que su contrincante Al Gore. Seis aspirantes republicanos compiten por ser el candidato presidencial de su partido, mientras que el presidente Joe Biden es el presunto candidato del Partido Demócrata ya que hasta ahora las más destacadas personalidades de ese partido han optado por no participar y varios aspirantes de terceros partidos e independientes se han sumado a la contienda. En las elecciones generales de 2024, se producirá un enfrentamiento entre dos “facciones” derechistas, el Partido “Demócrata” con posiciones visiblemente más a la derecha que antes, y una tendencia a que se le separen sectores del voto más al centro y a la izquierda. En el Partido Republicano, las tendencias son ultra derechistas, claramente fascistas. Realmente son dos “facciones” de un “partido único”, representando a la plutocracia y al imperialismo. A continuación, un análisis de donde se encuentran los factores políticos en los EEUU. en la misma arrancada de la carrera presidencial, que se acelerará ya al mismo comienzo del 2024. Aspirantes del Partido Republicano La situación dentro del Partido Republicano es bastante simple. Se trata de tener un candidato de “reserva” para si Trump no pueda contender […]

Por: Pablo Jofré Leal*  La reacción de algunos chilenos, domiciliados en el progresismo político, miembros de la comunidad judía de Chile, creencia que me merece el mayor respeto desde el punto de vista de sus dogmas religiosos, como también lo asumo respecto a practicantes cristianos, musulmanes, budistas, zoroastrianos, maronitas y ateos, no me hace obviar el hecho que no es posible aceptar sin más llamados a cancelar, silenciar o exigir rectificaciones, por más discrepancias que ellas generen. Las palabras de la Sra. Carmen Hertz junto a las del Sr. Miguel Lawner – este último invitado como exponente a la presentación del libro “Sionismo: la ideología que extermina” del periodista Pablo Jofré Leal  y de la cual se excusó de asistir por razones de salud – más allá de debilitar la tesis esgrimida por Daniel Jadue, con respecto a sostener la necesaria reflexión que hay que tener frente a la posición supremacista de ciertas visiones del mundo, más bien fortalece los dichos del alcalde de Recoleta. Esto, pues, al exigir rectificaciones frente a una opinión dada, fundamentada y concreta los pone, a miembros de esa comunidad, en un lugar intocable, inalcanzable desde el punto de vista del cuestionamiento o la opinión discrepante. Daniel Jadue no llama al odio o la incitación de ataques a determinados individuos, nos convoca a la reflexión respecto que, si existe o no un pueblo elegido y una tierra prometida. Tema, con toda lógica y necesario de discutir, sobre todo en momentos que Palestina está sometida a un proceso de exterminio a manos de aquellos que sustentan el dominio de las tierras palestinas en función de lógicas, visiones y conductas supremacistas y de destino manifiesto. Daniel Jadue apelando incluso a su relación con chilenos de creencia judía sostiene explícitamente, en el video al cual hace referencia la Sra. Hertz y el Sr. Lawner “Galeano decía que había que respetar lo que fuera respetable y cualquier ideología – N.A el sionismo – que parta de la premisa  supremacista, nazismo o el sionismo  o el apartheid sudafricano,   que nos quiere plantear a todos que hay  un conjunto de seres humanos que son mejores  que otros  o más elevados que otros  o elegidos por un dios que nadie tiene el gusto de conocer  eso ya me genera una desconfianza única. De hecho, yo siempre discuto con muchos de mis amigos, que son judíos de izquierda, en una discusión muy fraternal, que para mí es una contradicción ser de izquierda y asumirse judío porque ser judío parte de una concepción que tiene que ver con un concepto supremacista, ser parte de un pueblo elegido. Entonces, si yo soy parte de un pueblo elegido, no crees en la igualdad de todos los seres humanos ante nada…” Dicho esto Jadue refiere explícitamente al libro presentado “aquí estamos ante una ideología – N.A el sionismo – que yo creo que es lo más nazi que he visto en mi vida y que Pablo lo relata a través de las propias declaraciones de sus principales […]

La disfunción en el Congreso, el partidismo tóxico, la violencia armada y la crisis migratoria en casa, y hacia afuera el respaldo a guerras en Ucrania y Medio Oriente, son desafíos que enfrenta Estados Unidos en 2024, heredados del pasado año. Por Deisy Francis Mexidor Corresponsal jefa en Estados Unidos Esquivar el borde del abismo no hace más que aplazar grandes crisis hasta el calendario que recién empieza, un año en el que el país tendrá la distracción de los comicios presidenciales que, si siguen un patrón anterior, podrían augurar disputas electorales y extremismos políticos. El 2023 puso sobre el tablero las pautas de los favoritos de los partidos tradicionales, republicano y demócrata, camino a los comicios del 5 de noviembre. En el primer mitin de su campaña presidencial Donald Trump (R) prometió utilizar el Departamento de Justicia para perseguir a sus adversarios políticos, empezando por el actual mandatario Joe Biden (D) y su familia. Además, pronosticó que aumentaría la represión a los inmigrantes con deportaciones masivas, entre sus prioridades si regresa a la Casa Blanca. Biden, sin prisa, dio a conocer que buscaría la reelección para “terminar el trabajo” y entró en la pelea con la confianza de que él es el único que podría vencer a Trump en una revancha, porque ya lo hizo una vez, pero la idea comenzó a causar cierta controversia. Durante el 2023 ambos contendientes provocaron rechazo y emociones negativas entre el electorado. Un tanteo de diciembre, de la agencia AP-NORC, arrojó que el 58 por ciento de los adultos estarían insatisfechos con Trump como candidato republicano, mientras que el 56 por ciento opinó lo mismo acerca de Biden como abanderado demócrata. Incluso los votantes expresaron su malestar porque desearían ver otros nombres en las boletas de noviembre. En ese sentido, no ha cristalizado la opción de un tercer partido y nombres como los independientes Cornel West o Robert F. Kennedy Jr. solo servirían, como plantean analistas, para drenar un puñado de votos a los demócratas. Por los republicanos, la exembajadora ante las Naciones Unidas Nikki Haley cerró un año en el que se convirtió de aspirante a la nominación, sin que creyesen mucho en ella, a la principal alternativa a Trump. Para el expresidente el 2023 no fue un año de ganancias, pese a ser el candidato favorito entre los republicanos camino a la nominación del partido. En los primeros seis meses del calendario fue acusado de 91 cargos penales entre estatales y federales, y tiene cuatro juicios pendientes en Nueva York, Washington DC, Georgia y Florida. Ahora mismo batalla para tratar de salvarse de los tribunales alegando inmunidad y, por otro lado, hay una fuerte presión para eliminarlo de la boleta electoral en algunos estados luego de los fallos excluyentes en Maine y Colorado. En estos momentos existen impugnaciones aún en curso en al menos 12 estados del país, basadas todas en una cláusula poco conocida de una enmienda constitucional promulgada después de la Guerra Civil (1861-1865), la cual inhabilita a funcionarios […]

Por Marcel Garcés Muñoz El escenario del Año Nuevo 2014 nos hace presente los inevitables balances y las perspectivas que se abren para un nuevo periodo político, social, económico, personal y colectivo. Se trata de un ejercicio que tiene que ver con los proyectos, con las demandas, con los sueños, las esperanzas, la búsqueda de una vida mejor y los objetivos de un futuro promisorio, de un escenario positivo, en definitiva de un horizonte posible y necesario de progreso, justicia, perspectiva, en todos los ámbitos de la vida personal, familiar y colectiva. Se trata de una legítima aspiración a la libertad, al desarrollo personal, familiar y colectivo, del triunfo del amor, de la realización  de los proyectos y propósitos de seguridad, de la felicidad, generada por una lucha, generosa, solidaria y colectiva. No podemos eludir una cierta sensación de insatisfacción y a veces desencanto y frustración  por los objetivos no alcanzados y  una cierta incapacidad de logros, ya sea por un ambiente y circunstancias hostiles, condiciones o posibilidades personales o del ambiente, las más de las veces  impuestas  por una sociedad históricamente injusta y una abrumadora manipulación de los medios de comunicación al servicio de un modelo político, económico y hasta cultural, y de una constante oposición  del modelo imperante a los sueños y esperanzas legitimas de la sociedad y las personas. Pero no debemos, no podemos permitirnos ceder a los ataques  de los enemigos de la libertad, la justicia, la democracia, la soberanía popular y democrática, y el futuro que  le debemos a las presentes y próximas generaciones de chilenos y la proyección de nuestras esperanzas. La evolución, el progreso, la conquista de nuestros sueños es una constante histórica de la sociedad  en su camino  hacia un futuro mejor. Y lo que debemos hacer, en cada circunstancia o vericueto es identificar claramente a quienes caminan por nuestra ruta, y a quienes se oponen, dificultan y conspiran contra  nuestros objetivos y legítimas aspiraciones y demandas. El 2023 nos dejó lecciones  valiosas de la capacidad de movilización, de toma de conciencia de una mayoría ciudadana, popular, de mujeres, de jóvenes, de trabajadores que rechazaron el engendro constituyente que pretendió imponerse a través del engaño, la amenaza, el terrorismo, la mentira, la manipulación, el chantaje social y político y la violencia. El rotundo e inapelable resultado del 17 de diciembre, que rechazó por un  contundente 55.8 por ciento  de los ciudadanos- 6 millones 890 mil participantes  que votaron por el “En Contra”, y optaron por mas democracia, mas justicia social, y por un futuro de esperanzas y logros personales y sociales, constató el verdadero perfil político de la mayoría ciudadana y su determinación a seguir por un camino de avances en la institucionalidad y en la presencia protagónica de las mayorías patrióticas y progresistas. Pero no basta con el reconocimiento de la derrota por personajes turbios como el caudillo neofacista  José Antonio Kast, que reconoció el fracaso “en el intento de convencer a los chilenos”, con su campaña del odio y la […]

Concluye un periodo de cuatro años, donde se llevaron a cabo cuatro elecciones, destinadas a definir los mecanismos para elegir los convencionales o consejeros y la forma de aprobar un nuevo texto constitucional. El plebiscito constitucional del 17 de diciembre de 2023 fue la votación más atípica de los últimos tiempos. No hubo prácticamente campaña electoral. Pequeñas reuniones en las esquinas, modestos banderazos, reparto de volantes en las ferias. Ausencia de concentraciones de cierre de campaña, en las principales ciudades del país, al menos tradicionales en las fuerzas de izquierda. Conocidos los escrutinios confirmando la victoria categórica de la opción “En Contra”, nadie salió a festejar en la Plaza Baquedano. No pasó un solo auto por las calles, a punta de bocinazos y enarbolando banderas. Nada.  Admitamos que el rechazo del monstruoso proyecto impuesto por el Partido Republicano es un alivio, porque arrasaba con conquistas sociales, políticas, ambientales, de salud, vivienda y educación, logradas por el pueblo chileno a lo largo de los últimos cien años.  El pueblo se ha pronunciado con claridad y contundencia en favor de la opción “En Contra” y ha rechazado una Constitución que pretendía profundizar el modelo ultra liberal en lo económico y conservador en lo moral. Un texto constitucional que negaba los derechos reproductivos de las mujeres. Una Constitución para los ricos, que despojaba de recursos financieros a las comunas más necesitadas. Una Constitución adversa al medio ambiente, intensificando la pérdida de soberanía sobre nuestros recursos naturales y a favor de la impunidad en materia de graves violaciones a los Derechos Humanos.   Naturalmente, que es un respiro. Pero nos quedamos con la menos mala: la Constitución de Pinochet, reformada durante el mandato de Ricardo Lagos y con algunas modestas enmiendas.  El estallido social iniciado en octubre de 2019, fue el detonante que condujo al proceso constitucional. Las movilizaciones sociales alcanzaron una magnitud colosal a lo largo de todo el país.  Un millón doscientas mil personas se manifestaron pacíficamente en Santiago. Semejante situación se vivió en el resto del país. A partir de entonces, se inició un período caracterizado por grandes manifestaciones reprimidas con violencia inusitada. Amnistía Internacional “documentó como, durante las manifestaciones de octubre 2019, Carabineros de Chile cometieron graves y generalizadas violaciones a los DDHH especialmente al derecho a la integridad personal y posibles crímenes de Derecho Internacional. De acuerdo con cifras a marzo de 2021 de la Fiscalía del Instituto Nacional de DDHH, se contabilizan más de 800 víctimas de violencia estatal y más de 400 casos de trauma ocular”. () El 20 de octubre de 2019, con el país en Estado de Emergencia, toque de queda y militares en la calle, el entonces presidente, rodeado de altos oficiales del Ejército reiteró que “estamos en guerra contra un enemigo poderoso, implacable y que no respeta a nada ni a nadie, dispuesto a usar la violencia sin ningún límite”. Finalmente, un mes más tarde, tras días febriles de conversaciones entre el oficialismo y la oposición, el Parlamento emitió el documento “Acuerdo por la […]

Santiago, 24 de diciembre de 2023 Compañero Daniel Andrade Schwarze, exPresidente Centro Estudiantes Ingeniería y FECH exDirigente Revolución Democrática Querido Daniel, Me dirijo a ti públicamente cómo una forma de acompañarte en las fiestas del fin de este azaroso año 2023. Que te sorprende en prisión política en Antofagasta, adonde fuiste llevado de manera tan aberrantemente injusta cómo ignominiosamente pública. Eres la víctima principal de un ataque feroz de lo más oscuro de nuestra sociedad, azuzado y financiado generosamente por los grandes abusadores de nuestro pueblo, mismos que hace medio siglo lograron derribar el gobierno de la Unidad Popular y conducir al martirio al Presidente Salvador Allende. Este ataque artero ciertamente no se dirige sólo contra tí, sino contra lo que has representado en forma brillante, tu expartido y generación política, nacida y fogueada en el nuevo ascenso de la lucha política masiva que nuestro pueblo iniciara hace una década y media, que estalló el 18-O y, sobrellevando una pandemia sin precedentes, se ha sostenido y manifestado en las 19 elecciones nacionales celebradas desde entonces. Con tu prisión buscan aplastar y despedazar a toda tu joven y extraordinariamente calificada cohorte, singularmente proba y honesta quizás hasta la ingenuidad, misma a la que han espetado con desprecio que “lo tuvieron todo y lo perdieron todo”. Tampoco se remite esta ofensiva reaccionaria a tu generación política, sino que también se dirige contra las notables cohortes revolucionarias, democráticas y progresistas que les han precedido. Destacando especialmente entre ellas las que nacieron y se foguearon al calor de las anteriores irrupciones masivas de nuestro pueblo en política, en los años ‘80 y desde luego en los ‘60 e inicios de los ‘70, del siglo pasado. Esta última, a la que tengo el inmenso privilegio de pertenecer, nació de la irrupción popular que ya reside en el corazón y en la mente de nuestro pueblo y será considerada por la historia, nada menos que cómo la Revolución Chilena con mayúscula, realizada por vez primera en forma impecablemente democrática y singularmente pacífica. Así se ha grabado ya en el corazón de la humanidad sobre el trasfondo trágico de La Moneda en llamas elevando a las alturas de la historia universal a la figura de su conductor, el Compañero Presidente Salvador Allende. Nada tienes de lamentar ni menos avergonzarte, nada, de lo que te ha llevado al lugar donde te encuentra este fin de año. Muy por el contrario, debes enorgullecerte de estar allí en representación de todos. Son gajes del noble oficio de político popular que has abrazado. No olvidaremos nunca la dignidad e inteligencia con que te has comportado en estos momentos difíciles. Así es como se conoce la gente, en los momentos duros. Mi generación, por ejemplo, que al igual que la vuestra conoció de muy joven los más extraordinarios éxitos y victorias del pueblo, no fue en estos donde afirma hoy su autoestima y respeto, sino en la manera digna en que nos comportamos cuando, como inevitablemente sucede en la política y en […]

Por María Elena Andonie Araque Según los textos bíblicos, Jesús nació en Belén, en un establo junto a su madre María y su esposo José. Los acompañaban pastores con sus ovejas y animales. Y cuentan que llegaron tres Reyes Magos de “Oriente”, cada uno con un regalo simbólico para el recién nacido: incienso, mirra y oro. Belén es una ciudad que se sitúa en el centro de Cisjordania, en las montañas de Judea, a 9 km al sur de Jerusalén. Tiene un gran significado religioso, justamente, por ser el lugar donde (según la Biblia) nació Jesús de Nazaret. Es muy visitada por turistas de todo el mundo, durante todo el año, en especial entre octubre y diciembre. Precisamente por la fecha en que se celebra Navidad:  el nacimiento de Jesucristo, entre el 24 y 25 de diciembre. Por esto, el lugar de culto o sagrado más concurrido es la Basílica de la Natividad, que se construyó en el siglo IV, bajo el imperio de Constantino, sobre el portal de la “Sagrada Familia” (según la religión católica). La historia cuenta que la Basílica fue prácticamente destruida en el año 2002. Por ser uno de los lugares de culto más importantes del planeta, (sino el más importante), la reconstruyeron, para continuar recibiendo a los devotos cristianos, católicos y turistas en general. En el año 1517, los turcos otomanos conquistaron Palestina. Y en Belén comenzó un período conflictivo que duró varios siglos. A fines de la primera guerra mundial, en 1917, Belén (Palestina) pasó a ser administrada bajo el mandato británico, que se comprometió a facilitar la formación en Palestina, de un “hogar nacional” para el pueblo judío sionista. Este compromiso fue claramente explicitado en la declaración de Balfour** el 2 de noviembre de 1917. Se redactó una carta firmada por el Ministro de Relaciones Exteriores Británico, James Balfour, dirigida al banquero y líder de la comunidad judía en Gran Bretaña, Walter Rothschild, para que se lo transmitiera a la Federación Sionista de Inglaterra e Irlanda. Esta declaración confirmaba explícitamente, la partición de Palestina, otorgándole el derecho a los judíos sionistas*** y anti sionistas a tomarse una gran parte del territorio de la histórica Palestina. Tras esta declaración, llegaron 100 mil inmigrantes judíos y sionistas a ocupar el territorio. Dada la ocupación, el pueblo palestino se alzó reiteradamente contra el colonialismo inglés y su apoyo a la constante y agresiva migración sionista. Como consecuencia, hubo múltiples rebeliones violentas de los árabes. En 1947, continuando el plan de partición de Palestina, ahora propuesto por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Belén junto a Jerusalén, fueron ciudades designadas como territorio Internacional, administrado por las Naciones Unidas. Y en 1948, después de la guerra de la independencia de Israel, se concretó la división de Palestina, llamada la Nakba, que significa la “catástrofe Palestina”. O sea, la destrucción de la sociedad y la patria Palestina. El 55% del territorio, quedó para el proclamado Estado de Israel, por sobre Palestina. El 5 de junio de 1967, el […]

Los resultados del domingo donde el voto En contra se impuso sobre el A favor, abre una discusión sobre los elementos que puedan explicar la derrota de la derecha envalentonada y por cierto del fracaso de dos procesos constitucionales conducidos por la élite política de modo transversal. Santiago de Chile, 20 de diciembre 2023 Crónica Digital

Por Marcel Garcés Muñoz De una manera coordinada la Derecha chilena, intenta  transformar poco menos que “un triunfo” político la inobjetable derrota de este domingo 17 de diciembre, en lo que pretendía ser una  revancha contra la voluntad democrática expresada  de una manera explícita y contundente en las urnas del Plebiscito  Constitucional y pretender desconocer la voluntad ciudadana, y lanzarse a un ataque  brutal contra la soberanía popular y  lanzarse en una ofensiva sediciosa, contra la cual la ciudadanía deberá responder de manera también rotunda. Las declaraciones agresivas de los políticos de la derecha pretendiendo desfigurar los resultados objetivos del plebiscito, al que se suman los líderes de las oligarquías empresariales y partidistas de la derecha  política – y algunos serviles  instrumentados  desde El Mercurio y otros medios comprometidos en una ofensiva comunicacional conspirativa contra la democracia, constituyen una respuesta  no solo altanera  e insolente de quienes pretenden ser los dueños  del país, sino se trata de una estrategia  y táctica  conspirativa, insurgente y terrorista. La voz de los líderes de los “gremios empresariales”, que en su momento se alinearon polìtica y económicamente con el proyecto de redacción de la Constitución de Republicanos y la Derecha, fue explícita tras el acto plebiscitario. Rosario Navarro, presidenta de la empresarial Sociedad de Fomento Fabril, SOFOFA,  interpretó el resultado del 17, como  “un llamado de atención a la política”, y dio por cerrada la demanda democrática de  una reforma constitucional, porque aseguró “es fundamental darle certeza al país”,  afirmando que  “el resultado es señal del cansancio de la ciudadanía con la prolongada discusión constitucional”. En tanto el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura, SNA, Antonio Walker, afirmó que  lamentaba que “hayamos perdido la oportunidad de tener un texto constitucional mucho mejor que el actual. Este era un texto que se hacía cargo de lo que está ocurriendo hoy en Chile  y el mundo”. Por su lado, Ricardo Mewes, presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio, insto a “dar vuelta a la página, en tanto Ana Lía Rojas,  de la  organización empresarial de la energía, indicó que su sector “necesita estabilidad”. En general estos y otros directivos empresariales, hablaron de “reactivar la economía”, “generar empleo”, “enfocarnos en la senda del crecimiento”, “reglas claras”, “reactivación”, y “la estabilidad política y social del país”. Lo que falta es preguntarnos qué significado tienen estas palabras oportunistas en la circunstancias políticas y económicas actuales, cuando la derecha intenta chantajear al gobierno precisamente en estos temas cruciales para  el desarrollo económico del país, y los niveles de justicia social indispensables en el país. Y claro, lo que intentan es aprovechar  el momento para instalar sus prioridades e intereses “gremiales”, empresariales y sobre todo financieros. No le importa a la Derecha y a sus  servidores en los escenarios políticos la contundencia de las cifras que constituyen la expresión democrática y soberana de la voluntad ciudadana: 55.8 por ciento de rechazo a la propuesta constitucional  de la ultraderecha  y sus mandantes empresariales y  sus cómplices, contra el  44.2 por ciento de aprobación, ( esto es, Republicanos, UDI, RN, Evopoli, las oligarquías de de la Soifofa, SNA, etc, , los Amarillos,  los Demócratas, serviles de la Sra. Rincón y  Matías […]

Puestos a designar a un grupo de personas que debían redactar una nueva Constitución para Chile, una mayoría circunstancial con grandes dosis de rabia al votar decidió elegir a un grupo mayoritariamente de un sector, que insuflados con ese triunfo electoral decidieron hacer una Constitución a su pinta y gusto, dejando absolutamente afuera a sus contradictores minoritarios. Esto, que pasó en el primer proceso constitucional, increíblemente pasó también en el segundo. Sin embargo, una vez creados los respectivos monstruos, la misma ciudadanía reparó en el desvarío cometido y rechazó sucesivamente las dos propuestas constitucionales partisanas. Cuando realizas un giro en 360 grados, las matemáticas nos enseñan que quedas en el mismo punto inicial. Es por ello que una primera conclusión de todo este largo proceso constitucional, es que la ciudadanía ha demostrado tener mucha mayor lucidez que la clase política respecto de la manera de decidir el futuro. Cambios si, refundaciones no. ¿Ha sido todo esto entonces una gran pérdida de tiempo y dinero? No necesariamente. El proceso tuvo la gran virtud de canalizar una grave crisis del sistema democrático que amenazó –incluso– con interrumpir el periodo presidencial anterior hace algunos años. Como sea, el proceso constitucional cambiante fue la manera de enfriar un estallido social que amenazaba con llevarse todas las instituciones a su paso. Se reclama que el proceso costó varias decenas de millones de dólares, suma relevante, pero –puesta en contexto– es una cifra sensiblemente menor que, por ejemplo, la que el país ha perdido por corrupción o fraudes. Sólo una idea: con el dinero del megafraude del caso “Tributos” se habrían financiado varios procesos constitucionales. El desafío para el futuro inmediato –entonces–es abocarse a los graves problemas que aquejan al país: delitos violentos en niveles inaceptables, economía con índices muy bajos de actividad, crisis estructurales en materia de educación, salud y previsión y persistentes actos de corrupción desde el mundo público y escándalos de fraude en el mundo privado. Por supuesto, es el gobierno el que debe tener el liderazgo en la mayoría de estos temas. Pero la oposición tiene un rol irremplazable para poder alcanzar acuerdos relevantes, ya que todos los problemas que hemos enumerado exigen reformas en el Congreso Nacional. La tentación de la oposición será alta para negarle “sal y agua” al gobierno, probablemente dándole la misma receta que éste utilizó en el pasado. Pero el riesgo de esta política lo conocemos mirando al otro lado de los Andes, con el triunfo de un outsider improbable como Milei. La ciudadanía no tolerará más cachetadas de payaso entre partidos con escasísimos niveles de representación y credibilidad y fácilmente le entregará sus votos a quien ofrezca terminar con “la casta”. Es pues, inevitablemente a mi juicio la hora de los acuerdos, el diálogo y las transacciones. Veremos si la política está a la altura. Imagen: Redes Sociales. Por Carlos Gajardo Pinto. Abogado y Asesor de la carrera de Derecho de la UTEM. Santiago, 20 de diciembre 2023. Crónica Digital.

Las opiniones vertidas en este medio de comunicación no necesariamente representan el sentir de Crónica Digital y son de responsabilidad de quienes las emiten.

Crónica Digital, es un medio de comunicación social, republicano y comunitario. Fue fundado el 19 de abril del año 2005. Su objetivo periodístico es informar sobre los principales noticias de Chile, América Latina y el mundo.

El director de Crónica Digital es el periodista Marcel Garcés Muñoz.

Su representante legal y editor general es el periodista Iván Antonio Gutiérrez Lozano.

El editor nacional es el periodista Ramón Vargas Vega.

El editor cultura es el periodista Miguel Alvarado.

Corresponsal en La Habana, Cuba, Florencia Lagos N.

El asesor legal es el académico y abogado Sr. Pablo Méndez Soto.

Los principales asociados informativos de Crónica Digital son la Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina , la agencia de noticias China, Xinhua y TV Brics.

En Chile, el medio electrónico El Maipo

Correo: cronicadigital@gmail.com
Dirección: Maturana 302 local 2
Santiago de Chile.

Desde el año 2005 Crónica Digital es parte de la Asamblea Nacional por los Derechos Humanos.

Crónica Digital es una marca registrada. Todos los derechos reservados.

Redacción Diario Crónica Digital
Fono: 950142601

Un café en una plaza con historia....

Maturana con Huérfanos
plaza Brasil,
Santiago de Chile.

La imagen tiene un atributo ALT vacío; su nombre de archivo es cafe-con-torta-900x675.jpeg