Los llamados de la oposición a continuar las protestas, pese al retiro temporal de los proyectos de ley que supuestamente las provocaron, hacen temer hoy que el gesto conciliador del presidente Rafael Correa cayó en saco roto.
«Y ahora a marchar con más ganas, no sólo contra el atropello, sino contra el engaño. El 25 (de junio) Guayaquil protesta», escribió el alcalde de esa ciudad portuaria, Jaime Nebot, en su cuenta de Twitter.
Otros que también recurrieron a las redes sociales para soliviantar a la población fueron el excandidato presidencial Guillermo Lasso, y los legisladores Andrés Páez y Lourdes Tiban, opositores acérrimos del proyecto de Revolución Ciudadana que lidera Correa desde su llegada al poder en 2007.
Anoche, en un mensaje a la nación, Correa anunció que en aras de fomentar la tranquilidad y la calma, sobre todo en víspera de la llegada del papa Francisco el 5 de julio próximo, retiraba temporalmente sendas propuestas que buscan incrementar los impuestos a las herencias y la plusvalía.
Para evitar que estos grupos provoquen más violencia, más aún cuando precisamos para la visita del papa Francisco un ambiente de paz, regocijo, reflexión para su recibimiento, he decidido retirar temporalmente los proyectos de ley mencionados, explicó.
De acuerdo con el jefe de Estado, a partir de esa decisión se abrirá un gran debate nacional sobre las propuestas, las cuales, reiteró, jamás afectarían a los pobres ni a la clase media, como argumentan sus detractores.
Queremos debates, no gritos, queremos argumentos, no manipulación, recalcó Correa, quien días atrás denunció que detrás de las protestas de los últimos días se esconde un plan desestabilizador orquestado por la derecha local, con asesoría extranjera, para sacarlo del poder.
El mandatario incluso retó a la oposición a reunir las firmas necesarias para llamar a un referendo revocatorio de su mandato, en lugar de estar aplicando estrategias golpistas.
Vamos opositores, en vez de usar la violencia, la fuerza, utilicen la Constitución: ÂíVamos a la consulta revocatoria, que los derrotaré una y mil veces!, los exhortó el mandatario.
A contrapelo de la reacción de Jaime Nebot y demás líderes opositores al gesto de Correa, otros sectores de la sociedad ecuatoriana aplaudieron al mandatario.
Demostró que defendemos los principios de la vida antes que cualquier rédito político, declaró el legislador de la gobernante Alianza PAIS Carlos Velasco a una televisora local.
El canciller Ricardo Patiño, por su parte, aseveró a través de Twitter que la opción del gobierno siempre ha sido el diálogo y la verdadera democracia, mientras que la asambleísta María Augusta Calle también resaltó la decisión de Correa.
Les estamos quitando el pretexto (a la oposición), y les estamos extendiendo la mano, y les decimos con la generosidad propia de un revolucionario, que nos sentemos a conversar, dijo Calle al canal multinacional Telesur.
Quito, 16 de junio 2015
Crónica Digital / PL