El expresidente de Bolivia Carlos Mesa aseguró hoy aquí que a Chile le falta voluntad política para encontrar una solución a la demanda de su país de tener una salida soberana al mar.
Mesa, quien es el representante oficial del Estado boliviano para la causa marítima que presentó La Paz ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ), llegó ayer a Ecuador como parte de una gira por América Latina para explicar la posición del gobierno de Evo Morales.
Mi misión es explicar a la comunidad internacional, y en especial a los países hermanos de América Latina, cuáles son los fundamentos jurídicos de la causa boliviana, qué es lo que Bolivia está demandando en La Haya, por qué lo está haciendo, y en qué consiste la base de esta demanda, señaló el exmandatario en entrevista con Prensa Latina.
Tras revelar que inmediatamente después de su llegada a Ecuador se reunió con el presidente Rafael Correa, el político boliviano aclaró que su viaje no tiene como objetivo buscar la adhesión ni la solidaridad de su anfitrión, ni de ningún otro gobierno del área, con la demanda boliviana ante la CIJ.
Lo que pretendemos es que tengan los elementos de juicio adecuados, y no cuenten con información distorsionada o equivocada, porque el tema es conflictivo y puede llegarse a pensar que Bolivia está tratando de vulnerar el Tratado de Paz de 1904.
Al respecto, recordó que tras la invasión y ocupación chilena en 1879, su país perdió 120 mil kilómetros cuadrados de superficie y 400 kilómetros lineales de costa, y que 25 años después se firmó el documento en el que la parte boliviana cedía ese territorio, a cambio de un derecho de libre tránsito, la construcción de un ferrocarril hasta el Pacifico y una compensación económica.
El Tratado no está involucrado en la demanda, recalcó Mesa, quien apuntó que el país altiplánico basa su querella en los compromisos reiterados hechos por diferentes gobiernos chilenos de otorgarle una salida soberana al mar.
Según Mesa, existen constancias de que en al menos seis ocasiones se hicieron esas propuestas formales por parte de Chile, la última de ellas, dijo, en 1983, y uno de los principios del derecho internacional establece que los compromisos y promesas formales que un Estado hace a otro son jurídicamente exigibles.
Lo que Bolivia le pide a la CIJ es que obligue a Chile a sentarse a negociar una salida soberana al mar, y que sea una negociación de buena fe, sobre bases razonables y con fechas definidas para el cumplimiento de los acuerdos, añadió.
De acuerdo con Mesa, hasta el momento el país austral no ha mostrado voluntad política para solucionar el litigio, y criticó además que se oponga tajantemente a la mediación de terceros.
La actitud de Chile es tan cerrada que no hay otra posibilidad que un juicio internacional, sentenció el representante del Estado boliviano, quien considera que el enclaustramiento marítimo de su país constituye un escollo para la integración regional.
Respecto al proceso en La Haya, Mesa explicó que luego de la presentación del caso por parte de Bolivia, el gobierno chileno presentó una demanda preliminar de incompetencia, a la que La Paz ripostó con sus contra-argumentos, por lo que se está a la espera del pronunciamiento que deberá emitir la CIJ en los próximos meses.
La disposición de Bolivia con Chile es de diálogo, recalcó el expresidente, tras anunciar que tras su estancia en Quito, proseguirá su gira por la región.
Por Nestor Marin
Quito, 14 de noviembre 2014
Crónica Digital / PL