Pero la situación es mucho más complicada, porque se trata de un terrorismo que después puede llegar a toda la región, a Europa e incluso a Estados Unidos, pues eso ya lo hemos visto antes, comentó.
Una hipotética confrontación de Estados Unidos y Rusia sería un retroceso notable en la búsqueda de una solución negociada al diferendo sirio, consideró la vocera oficial.
Washington cambia mucho de parecer y posiciones, primero dijeron que era importante continuar el diálogo con Moscú para una salida a la crisis siria, y apenas unos días después anuncia que rompe toda negociación con nosotros en ese sentido, apuntó.
Medios de prensa locales se hicieron eco de anuncios filtrados a la prensa sobre la posible presentación a la Casa Blanca y el Congreso norteamericano de un plan para una agresión militar directa contra Siria.
Las filtraciones citadas aquí se refieren, además, a un análisis previo del citado plan por parte de la Agencia Central de Inteligencia, el Estado Mayor Conjunto y otros órganos de poder, aunque ello carece de confirmación oficial.
Rusia demandó a Estados Unidos aplicar lo establecido en cinco acuerdos pactados el pasado 9 de septiembre en Ginebra, incluidas las acciones contra Al Nusra o su nueva versión y el movimiento terrorista Estado Islámico.
En lugar de cumplir con lo establecido, incluida la presión sobre la llamada oposición moderada para un fin de las acciones bélicas, Estados Unidos acusó a Rusia de ser el responsable del auge de la violencia en Siria.
Moscú, 6 de octubre 2016
Crónica Digital/ PL