La encuesta Plaza Pública CADEM, generalmente vinculada con el oficialismo, mostró que un 66 por ciento de las personas identificadas con la izquierda y centro izquierda no comparten los dos tercios que el “Acuerdo por la Paz Social y la Nueva Constitución” ha pretendido imponer como para los acuerdos del futuro órgano constituyente.
Asimismo, resulta llamativo que casi un tercio de la población (28 por ciento), considere “mal” o “muy mal” el acuerdo, considerando que se le ha querido presentar, con una majadera campaña de los medios de comunicación, como expresión del consenso de casi la totalidad de los actores políticos.
El apoyo a una Nueva Constitución es claramente abrumador: un 82 por ciento se expresa de acuerdo (un 90 entre las personas de izquierda y centro izquierda; un 88 entre aquellos que se consideran independientes; un 79 en el centro e incluso un 55 en la derecha). Un 60 por ciento quiere, asimismo, que esa Nueva Constitución sea resultado de un órgano integrado en su totalidad por ciudadanos electos.
Un 67 por ciento piensa que es necesario “cambiar totalmente la actual Constitución y redactar una nueva” y un 87 está de acuerdo con un plebiscito de entrada.
En este cuadro, es interesante que un 56 por ciento está de acuerdo con que continúen las movilizaciones y marchas.
Constata también la encuesta que los cuatro principales problemas a los la ciudadanía piensa que el Gobierno debiera dar mayor prioridad son la salud (34), pensiones (31), empleo y sueldos (25) y nueva Constitución (23).
Por Iván Gutiérrez Lozano. El autor es periodista.
Santiago, 18 de noviembre 2019
Crónica Digital.