Australia autorizó la extradición a Chile de Adriana Rivas (Chani), acusada del secuestro entre los años 1973 y 1977 de siete revolucionarios, entre ellos el Subsecretario General del Partido Comunista, Víctor Díaz.
De acuerdo con el diario “The West Australian”, la medida fue determinada por el magistrado Philip Stewart en base a una orden de la Corte Suprema de Chile.
El medio de prensa recordó que Rivas, durante la dictadura militar de Augusto Pinochet, fue asistenta personal del jefe de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), General Manuel Contreras, y suboficial de la brigada secreta de exterminio anticomunista con nombre clave Lautaro.
La sentenciada está detenida en una prisión de Sidney desde febrero de 2019 y los procesos judiciales para lograr su libertad provisional durante la vista de extradición no tuvieron éxito.
Adriana Navarro, abogada chilena que defiende a las víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet opinó que de esa manera Australia hace justicia ante los chilenos.
Adriana Rivas defendió en 2013 ante la radio local SBS la tortura como un método para extraer información y consideró sus años al servicio de la DINA como los mejores de su juventud.
En los últimos seis años del pasado siglo entraron a territorio australiano con visado permanente más de 400 exagentes de la DINA y la Central Nacional de Informaciones (CNI).
Entre los revolucionarios presuntamente secuestrados y desaparecidos por Rivas están Fernando Navarro, Lincoyán Berríos, Horacio Cepeda, Juan Ortíz, Héctor Veliz y Reinalda Pereira, quien estaba embarazada en el momento de su detención.
Canberra, 30 de octubre 2020.
Crónica Digital / Prensa Latina.