La industria biofarmacéutica de Cuba produce a gran escala el candidato vacunal Abdala contra la COVID–19, a fin de asegurar las dosis necesarias para su ensayo clínico fase III, anunció BioCubaFarma.
El Grupo Empresarial de las Industrias Biotecnológica y Farmacéutica del país caribeño (BioCubaFarma), mostró imágenes de la planta de bulbos perteneciente a los Laboratorios AICA donde transcurre el proceso productivo de Abdala.
Asimismo, anunció la visita a esas instalaciones del vicepresidente de BioCubaFarma, Eulogio Pimentel, con directivos del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), líder del proyecto de dicha vacuna.
Abdala ya demostró seguridad e inmunogenicidad contra la COVID–19. Su ensayo clínico fase II comenzó́ el pasado 1 de febrero en el Hospital Saturnino Lora, de la ciudad de Santiago de Cuba con cerca de 760 voluntarios.
De acuerdo con la doctora Marta Ayala Ávila, directora general del CIGB, los resultados del estudio fase I, iniciados el pasado 7 de diciembre, arrojaron que el perfil de seguridad y reactogenicidad del inmunógeno fue favorable para las dos dosis del candidato vacunal estudiadas.
“Si los resultados de seguridad e inmunogenicidad se corroboran, se estará evaluando esta fase II en el mes de marzo (debe concluir el ensayo para el día 15 de marzo), y estaremos preparándonos aceleradamente para plantearnos una fase III”, dijo la experta
La industria cubana presenta suficiente capacidad instalada, con tecnología para elaborar más de 100 mil bulbos diarios, con volúmenes de llenado de 12 mil por hora.
Cuba anunció recientemente la producción del primer lote de 150 mil bulbos de otra de sus cuatro propuestas: Soberana 02, actualmente la más avanzada contra la COVID–19, prevista a iniciar etapa III de ensayos clínicos el próximo 1 de marzo, con 42 mil 600 voluntarios.
El país se prepara también para la producción de 100 millones de dosis de ese candidato, con la cual podrían inmunizarse todos los extranjeros interesados en el producto cubano, aseguró el director del Instituto Finlay de Vacunas y líder de ese proyecto.
A esos inyectables contra la COVID–19, se suman otras dos vacunas: Soberana 01 del Finlay y Mambisa del CIGB. Este último es el único para administrar de forma nasal.
La idea es trabajar en varias formulaciones para beneficiar a personas de diferentes edades y tener la posibilidad de vacunar a toda la población. Cuba podría tener inmunizada a gran parte de su población en el curso de este 2021.
La Habana, 25 de febrero 2021.
Crónica Digital / Prensa Latina.