El presidente de Chile, Sebastián Piñera, dijo hoy «lamentar» la muerte de un joven por un policía, pero respaldó al cuerpo de Carabineros a pesar de los numerosos cuestionamientos a esa institución.
Al referirse por primera vez a ese suceso, que conmocionó al país y destapó violentas protestas en la ciudad de Panguipulli, donde ocurrió el hecho, Piñera dijo que «Siempre una muerte es dolorosa», pero acto seguido puntualizó que el control preventivo de identidad -circunstancia en la que ocurrió el hecho- es «legal, útil y necesario».
No obstante señaló que Carabineros tiene que cumplir con los protocolos que regulan el uso de la fuerza y el empleo de arma fuego solo en casos extremos de legítima defensa, y señaló que el Gobierno le pidió a la jefatura de ese cuerpo que entregue toda la información disponible a la Fiscalía y a los tribunales para que juzguen si estos se cumplieron adecuadamente.
El mandatario no se refirió a los numerosos llamados desde la oposición a reformar o incluso refundar ese cuerpo policial y, en cambio, expresó su respaldo a Carabineros al señalar que «es una institución fundamental y es la primera línea en la defensa del orden público, la seguridad ciudadana, el Estado de derecho y la democracia».
En tanto, el sepelio de Francisco Martínez, el joven baleado el pasado viernes, se efectuó este lunes en el cementerio de El Prado, en la comuna de Puente Alto, en esta capital.
El cortejo fúnebre partió desde la vivienda de sus familiares, donde se realizó el velorio la víspera, acompañado por cientos de personas que recorrieron las calles de esa municipalidad en medio de un fuerte dispositivo policial, aunque no se reportaron mayores incidentes.
Santiago de Chile. 8 de febrero 2021
Crónica Digital/PL
