- Una mirada a la vida silvestre en Chile, desde la óptica de un guardaparques es el nombre de la publicación, editada por CONAF, cuyo lanzamiento fue realizado en la conmemoración del Día Mundial de la Vida Silvestre.
Veinte historias que narran vivencias entre el ser humano y la naturaleza componen el libro Una mirada a la vida silvestre en Chile, desde la óptica de un guardaparque, lanzado el pasado 3 de marzo. La publicación, escrita por Mario Ortiz Lafferte, guardaparque de la Corporación Nacional Forestal (CONAF), fue dada a conocer en el Museo Nacional de Historia Natural, en una ceremonia en que, además, se conmemoró el Día Mundial de la Vida Silvestre.
Su autor, Mario Ortiz, es técnico agrícola y se ha desempeñado como guardaparque en CONAF durante 34 años, en donde ha ejercido como tal en unidades como las reservas nacionales Lago Peñuelas, Radal Siete Tazas y Pingüino de Humboldt, además de los parques nacionales Archipiélago de Juan Fernández y Bosque Fray Jorge. Actualmente es el administrador de la Reserva Nacional Las Chinchillas, ubicada en la provincia del Choapa, Región de Coquimbo.
Según Aarón Cavieres Cancino, director ejecutivo de CONAF, “este libro refleja muy bien el valor, la preocupación por la vida silvestre, las sensaciones y emociones que ella genera, por lo tanto, es un excelente medio para sensibilizar al mundo y a nuestra población del valor y beneficios que nos generan nuestras áreas silvestres y la necesidad de conservarlas y protegerlas”.
Durante su intervención, Cavieres resaltó que CONAF ha implementado un trabajo asociado a la protección y conservación de la vida silvestre en el país, principalmente a través de la administración del Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado (SNASPE), a través de la labor de sus guardaparques, quienes “cumplen un rol primordial e irremplazable, pues conviven diariamente con la naturaleza, la observan, la estudian y son quienes mejor la conocen”, precisó, trabajo que ha permitido, por ejemplo, redescubrir especies que se pensaban extintas o fuera de su área de distribución, como la chinchilla de cola corta en Atacama, el degú de isla Mocha o la robinsonia en el archipiélago de Juan Fernández.
Por su parte, para Claudio Gómez, director del Museo Nacional de Historia Natural, el libro es “el reporte desde la trinchera de lo que está ocurriendo cotidianamente en estas áreas protegidas, a los cuales la mayoría de las personas accedemos como turistas, o por períodos breves, mientras que la presencia de los guardaparques es continua. A través de ese trabajo cotidiano, ellos pueden entender los ciclos, las pequeñas grandes maravillas de la naturaleza y plasmarlos en un lenguaje accesible, lo que es un tremendo logro”.
Precisamente, Mario Ortiz, sostuvo al respecto que “uno como guardaparque ve que gran parte de la comunidad, de origen urbano, se ha desconectado de la vida natural. Cuando uno los ve llegar a las áreas silvestres, y los ve tan desconocedores de cosas que realmente debieran ser sabidas, me di cuenta que tenía un papel importante que cumplir como un comunicador de todas estas cosas que tengo el privilegio de ver, por estar en primera línea frente a la naturaleza, de alguna manera, tomarlas y llevarlas a la comunidad”.
El libro fue ilustrado por César Jopia Quiñones, quien actualmente, se desempeña como director de la revista digital Bioma, publicación que desde el año 2013 a la fecha edita reportajes sobre el patrimonio natural y cultural del país.
Una mirada a la vida silvestre en Chile, desde la óptica de un guardaparques, que tuvo un tiraje de dos mil ejemplares, será distribuida en las oficinas regionales de CONAF, para ser utilizada como material de apoyo en las diversas actividades de educación ambiental que ejecuta la institución. Además, se destinarán copias a bibliotecas y centros de estudios científicos. Quien esté interesado en conocer las vivencias de Ortiz, puede leerlo desde aquí.
Santiago de Chile, 4 de febrero 2016
Crónica Digital
