El diputado Sergio Aguiló (IC), llamó a la mesura a la Ministra del Trabajo Evelyn Matthei, quien hoy acusó una persecución “asquerosa” contra su padre por parte de quienes buscan aclarar lo sucedido en el caso delas torturas al General Bachelet tildándolos de “gente que sólo quiere venganza, que están llenos de odio y que no buscan la verdad».
Según Aguiló “estamos tratando que se haga verdad y justicia, y que si efectivamente Fernando Matthei, como director de la Academia de Guerra, jugó un rol importante en las violaciones a los derechos humanos, nosotros creemos que tiene que pagar en los tribunales de justicia porque estos son delitos gravísimos de lesa humanidad que le costaron la vida a mucha gente”.
Aguiló le recomendó a la ministra Matthei “tómese los calmantes, tranquilícese, nadie quiere perseguir a personas inocentes, estamos en los tribunales de justicia de nuestro país, con un estado de derecho como elque tiene Chile, tratando de que se haga justicia, nada más”.
Para el diputado de la Izquierda Ciudadana, “la ministra está muy descontrolada, muy fuera de sí, completamente fuera de control. Quiero comprender que juega un rol de una hija defendiendo a su padre, pero como Ministra de Estado naturalmente debería tener mecanismos de control que probablemente las personas comunes y corrientes no tienen por qué exigírseles ”.
Santiago de Chile, miércoles 1 de agosto 2012.
Crónica Digital
El Diputado Aguiló tiene toda la razón.
La Ministra del Trabajo debería entender y comprender de una vez por todas, que si después de más de 38 años todavía la ciudadanía chilena busca la verdad y justicia sobre las horrorosas violaciones a los derechos humanos es porque responsables directos e indirectos de esos delitos siguen negándose a cooperar con la justicia y ocultan valiosa información que podría completar los procedimientos judiciales que se arrastran por tantos años.
Para la ministra es bastante fácil tratar de descalificar a quienes buscan esa verdad y justicia con los manoseados epítetos de seres sedientos de venganza y odios. Pero se trata tan sólo de su mediocre e inútil intentona de descalificar a personas de sólida autoridad moral, la cual nace de la fuerza de la razón y nó de la razón de la fuerza como desgraciadamente asoló Chile ese siniestro 11 de Septiembre de 38 años atrás.
Aguante ministra Matthei,tòmese unas gotitas de pasinerval,muy buena para los nervios.
Y no se preocupe que la Ley en Chile siempre estrà a favor de su valiente padre,quien a declarado que siendo
èl miembro de la Junta Militar, nunca supo de violaciones a los derechos humanos.
Y como si fuera poco tambièn ha declarado que no està arrepentido de nada de lo que sucediò en dictadura.
Pìdale usted ministra a la Virgencita porque el alemàn
Alhzeimer,deje tranquilo a su señor padre.