Como un paso importante en materia de igualdad en el acceso a la educación calificó la bancada PC-IC el proyecto que busca impedir que el cobro de altos aranceles restrinja el ingreso de jóvenes de bajos recursos a las escuelas de formación castrense.
El proyecto pretende de esta forma comprometer a las escuelas matrices con el derecho universal a la educación y avanzar hacia el fin de la discriminación socioeconómica para un amplio sector de la sociedad chilena, por vía de que por ley no sea posible cobrar arancel.
El jefe de la Bancada PC-IC, diputado Hugo Gutiérrez, manifestó que la actual política de ingreso, caracterizada por una alta segregación social, genera dentro de las Fuerzas Armadas“verdaderos centros ideológicos”, donde a los jóvenes se les inculca valores que no van en la misma dirección del proceso democrático que vive Chile.
“Las políticas segregadoras no son acordes a la democracia que queremos construir. A ellos se les inculca ideales y valores para proteger intereses económicos y a estas alturas del partido, no es tolerable”, señaló el parlamentario.
Para Gutiérrez, no hay nada que justifique la actual segregación que existe entre las escuelas de suboficiales y oficiales. Las primeras son gratuitas; mientras que las segundas tienen un alto costo, que es incluso mayor para las mujeres. Bajo esa lógica, Bernardo O´Higgins, héroe de la Independencia de Chile, en las actuales circunstancias no hubiese sido parte de la oficialidad militar debido a su origen sociocultural.
“Consideramos relevante rescatar lo que significa la figura de O´Higgins y recalcar que si hoy este héroe patrio hubiese querido ingresar a la Escuela Militar, no lo podría haber hecho. Hay una serie de discriminaciones que se generan en dicha escuela y de los institutos armados para que ingresen las personas de hogares monoparentales, es decir, madres o padres solteros, a jóvenes criados por una abuela o que tengan algún tipo de antecedente político”, señaló Gutiérrez.
Para la diputada Camila Vallejo, integrante de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, el proyecto de ley busca que dichas escuelas de formación sean parte de un sistema integrado e inclusivo, tal como lo consagra la Reforma Educacional establecido en el programa de Gobierno de la Nueva Mayoría.
“La reforma educacional tiene el espíritu de permitir que no existan trabas económicas u otro tipo de arbitrariedades que impidan acceder a la formación que las personas quieran elegir. Los ciudadanos que tengan el interés de ingresar a esas instituciones deben tener los mismos derechos que el resto de la población”, detalló la diputada por La Florida.
Vallejo agregó que “el compromiso que alguien pueda llegar a tener con su país, no tiene relación con origen social, étnico, parentescos, creencia religiosa o posición política”.
En ese contexto, el proyecto señala que “no pretende, en ningún caso, negar la importancia del establecimiento de mecanismos de selección para el ingreso de las personas que deseen ser parte de nuestras fuerzas armadas y de orden. Pero de lo que sí trata este proyecto es de eliminar aquellas trabas arbitrarias y discriminatorias ligadas a cuestiones de origen, sexo, religión, estado civil, condición económica, y otros, y regular por ley la admisión e ingreso a la escuelas de oficiales de las fuerzas armadas y de orden”.
Santiago de Chile, 21 de agosto 2014
Crónica Digital
Me parece totalmente justa y acertada esta iniciativa.
Es de esperar que la mayoría de los parlamentarios la apoyen decididamente. Se trata de un proyecto que se inspira en la noble pólítica de seguir profundizando la democratización de la sociedad chilena.
Sobre esta materia, también sería del caso conocer e informar sobre la presencia o ausencia, en las FF. AA. y Carabineros, de ciudadanos de origen étnico, específicamente en los institutos para formación de oficiales. Se sabe que entre los suboficiales hay personas de dicho origen. Pero no así entre los oficiales.
Al menos, jamás he sabido de un general o almirante de descendencia aborigen.