Los médicos paraguayos desarrollan hoy su segundo día de paro y movilizaciones en demanda al Gobierno de una solución a la falta de medicamentos e insumos y el reclamo de que duplique el presupuesto asignado al sector.
Al igual que la víspera, los galenos detienen su labor durante dos horas cada día y salen a las calles cercanas a sus centros de trabajo para expresar la protesta por la deficiente situación de la salud pública en Paraguay. Los manifestantes piden la reparación de hospitales y centros de salud en mal estado, un incremento salarial y una política presupuestaria diferente por parte del ministerio de Hacienda que sólo entrega anualmente, según señalaron, el 30 por ciento de las bajas partidas asignadas.
La demostración de «brazos caídos» como le llaman al movimiento de esta semana registró en su primer día una amplia aceptación, de acuerdo a las organizaciones que agrupan a los médicos.
Con el objetivo de afectar lo menos posible a la población, los médicos detienen su trabajo una hora en la mañana y otra en el turno de la tarde y utilizan ese tiempo para las demostraciones en las calles cortando el tránsito y desfilando con carteles y telas con sus consignas.
Ellos reclamaron también al gobierno la destitución de César Pimienta, director de Recursos Humanos del ministerio de Salud, antiguo gremialista al cual critican su incondicionalidad ahora con la política gubernamental en relación a la especialidad.
Pimienta hizo declaraciones y se negó a presentar su renuncia pero resulta evidente que las denuncias de los hombres y mujeres de blanco lo sitúan en dificultades dentro del mismo gobierno.
Un momento importante en la situación de este conflicto laboral pero también de tipo social por el carácter de las peticiones de los galenos paraguayos será la programada nueva reunión de mañana, miércoles, con el presidente de la República, Horacio Cartes.
Los médicos esperan una definición gubernamental sobre sus planteamientos antes de la aprobación en el Congreso del Presupuesto de la Nación para 2015 aunque, mientras tanto, mantienen preparativos para la huelga general que se iniciará el 30 de septiembre.
Asunción, 2 de septiembre 2014
Crónica Digital
Mar Sep 2 , 2014
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, aprovechó el segundo debate televisivo para resaltar flaquezas y fisuras del programa de la candidata de los socialistas del PSB, Marina Silva, destacan hoy aquí medios de prensa. Se trató de un espacio televisivo, celebrado anoche y al cual asistieron siete pretendientes a la jefatura del Estado, pero la disputa entre Rousseff y Silva polarizó la discusión, señalan diarios y sitios digitales como Vermelho y Brasil 247.A diferencia de primer debate, celebrado el 26 último, en este la mandataria, quien busca su reelección el 5 de octubre próximo, expuso con claridad sus argumentos y cuestionó el discurso de su adversaria.«El mayor riesgo de una persona es no comprometerse con nada, sólo tener eslóganes, frases genéricas, usted tiene que explicar lo que va a hacer, decir de dónde vendrá el dinero» para impulsar medidas y propuestas, aseveró la jefe de Estado sobre su contrincante del Partido Socialista.Alertó sobre las contradicciones de la plataforma política de Silva, quien prometió bajar las tasas de interés, la inflación y aumentar el empleo, y reitero que asuntos de este tipo no se resuelven con lindas palabras o buenas intenciones.Sin apoyo político y sin una negociación, la dama no tendrá apoyo para grandes proyectos en Brasil, indicó al recalcar que sin el respaldo del Congreso no es posible garantizar un gobierno estable y sin crisis institucional.La jefa de Estado refutó asimismo que ella no reconozca sus errores, al ser interrogada por los problemas existentes aun en las esferas sociales y aclaró que a pesar de lo avanzado, necesita por eso otro mandato para mejorar estos sectores.Criticó asimismo la falta de transparencia de su contrincante, quien se negó a revelar los nombres de las empresas que le pagaron 1,6 millones de reales (714 mil 285 dólares) por ofrecer conferencias en diversas instituciones.Silva, una devota evangélica, volvió por su parte a rectificar su posición en torno al matrimonio de personas del mismo sexo, que primero defendió, después rechazó y ahora dijo que apoyará este tipo de unión.En el debate, la pretendiente Luciana Genro, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), cuestionó la nueva política impulsada por la candidata socialista.En particular, se refirio a que Silva cuenta con un programa muy parecido al de Aécio Neves, el postulante presidencial de la Social Democracia (PSDB), y de tener entre sus asesores a economistas de esa tendencia política.Analistas políticos destacaron la postura de Neves, quien no contravino a Silva, quien -según últimas encuestas- lo desplazó del segundo al tercer puesto con 15 por ciento de respaldo popular. Brasilia, 2 de septiembre 2014 Crónica Digital / PL