El Estado Mayor de la República Popular de Donetsk (RPD) aseguró hoy que las milicias están en máxima alerta ante los ataques del Ejército ucraniano contra la localidad de Yasinovátaya, cercana a la capital republicana.
Según el Cuartel General de las fuerzas rebeldes, una columna de tanques a las órdenes de Kiev entró en Yasinovátaya y abrió fuego contra las áreas aledañas, reportó Novosti.
La fuente de las milicias informó que debido a estas acciones militares todos los puestos de control están reforzados y todas las posiciones permanecen en alerta combativa.
El Ministerio de Interior de la RPD, en tanto, confirmó que al menos tres civiles resultaron heridos y varias casas destruidas en la región de Kievski, próxima a Yasínovátaya.
Dos adolescentes murieron la víspera y tres fueron heridos víctimas de un proyectil disparado por la artillería ucraniana contra una escuela en Donetsk, según denunciaron las autoridades municipales.
El Primer Canal de la televisión rusa entrevistó a uno de los sobrevivientes hospitalizado, quien criticó la agresión de los militares ucranianos contra un grupo de menores de edad que jugaban al fútbol.
La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), por su parte, informó que enviará inspectores al lugar de la tragedia para que entrevisten a los testigos e incluyan esa información en su reporte diario.
Vladimir Markin, portavoz del Comité de Investigaciones de Rusia, subrayó que Moscú abrió un expediente penal por este ataque artillero del Ejército y la Guardia Nacional de Ucrania contra una escuela en Donetsk.
En Moscú, el plenipotenciario de Derechos Humanos en el Ministerio de Asuntos Exteriores, Konstantin Dolgov, instó a realizar una investigación imparcial sobre la muerte de los dos niños.
Al referirse al nuevo ataque de Kiev contra la RPD, el presidente de la Duma estatal (cámara baja parlamentaria rusa) coincidió en que la muerte de los colegiales «no debe quedar impune».
Narishkin reconoció que la tregua pactada en septiembre en Minsk contribuyó a disminuir la tensión en el este de Ucrania, pero advirtió que en muchos casos se incumple lo acordado y por eso la población civil continúa sufriendo.
El conflicto originado por la ruptura del orden constitucional en Ucrania el 22 de febrero último y agravado tras el inicio de una ofensiva de gran envergadura ordenada por Kiev contra la población del sureste ya causó más de cuatro mil muertos, en su mayoría civiles.
Adicionalmente, como resultado de las acciones bélicas en esa zona el 31 de octubre sumaban más de cuatro mil los heridos y los desplazados dentro del territorio ucraniano o hacia Rusia rebasaban el millón.
Kiev, 6 de noviembre 2014
Crónica Digital / PL