Argentina desplegó velas esta noche y apabulló a Paraguay 6-1, pero con todo el esplendor su entrenador, Gerardo Martino, dijo que debe mirarse a Chile con mucho respeto en la final de la Copa América de Futbol.
Será el próximo sábado a las 17:00 hora local en el estadio Nacional de Santiago, un verdadero duelo entre los equipos que probablemente jugaron mejor durante todo el torneo, con deslices en ambos casos y diferencias cualitativas.
El Tata Martino confesó que Argentina tuvo mucha contundencia ofensiva, se encontraron futbolistas virtuosos y se logró una notable asociación que generó goles, aunque faltó mayor presión en el mediocampo.
En conversación con un grupo de periodistas, el DT de los rioplatenses reconoció que le gustó más la defensa y la marcación del primer tiempo de Argentina contra Colombia en cuartos de finales.
Sin embargo, aceptó que la reacción de sus dirigidos fue excelente tras encajar el único gol de los paraguayos. «Seguimos igual, no cambiamos, apostamos a la filosofía de ataque incisivo y retomamos la superioridad», acotó.
Martino aplaudió la actitud de Lionel Messi, quien siempre es vital en el funcionamiento del plantel. Generó tres asistencias de gol, se entendió de maravillas con el Flaco Pastore (Javier), quien fue otro de los pilares, precisó.
El preparador y Messi manifestaron que el máximo deseo del elenco es alcanzar la Copa América el sábado. No obstante, se trata de un primer objetivo en un largo camino hacia el Mundial de Rusia 2018.
«Sabíamos que en el momento en que entráramos se darían las cosas juntas; encontramos más espacio, creamos las situaciones y seguimos con mucha ilusión, resaltó el que para muchos es el mejor futbolista del mundo.
Por su parte, Sergio Romero, el guardameta titular argentino, dijo que tiene la esperanza de que el sábado se destape Leo (Messo) por merecimientos y todos sus aportes al equipo.
Chile es un rival complicado, que gusta también de manejar la pelota y es local, pero nosotros seguiremos subiendo nuestro nivel, apuntó.
Martino reflexionó que si bien la meta es hacerse de la corona continental, el trabajo recién comienza con una selección que apenas tiene 13 partidos bajo su mando.
Por Michele Dali
Santiago de Chile, 1 de julio 2015
Crónica Digital / PL