La popular compañía de Teatro Aleph festejó el primer aniversario de funcionamiento su centro cultural en La Cisterna, en la casona que le fue entregada en concesión gratuita por el Ministerio de Bienes Nacionales. En la oportunidad, se expuso el completo proyecto de habilitación arquitectónica del lugar.
La celebración incluyó música e intervenciones artísticas y fue encabezada por el ministro de Bienes Nacionales, Víctor Osorio, y la directora del Teatro Aleph en Chile, Gabriela Olguín. A la actividad también concurrieron el Seremi Metropolitano de Bienes Nacionales, Felipe Morales; la directora regional de Cultura, Ana Carolina Arriagada; el reconocido músico José Seves, integrante de Inti Illimani Histórico; el cineasta Patricio Paniagua; la concejal Ximena Tobar; actores y actrices del antiguo Teatro Aleph y de la nueva generación, y vecinos de la comuna.
“El Teatro Aleph está definitivamente de regreso en Chile. Tiene su domicilio en el corazón de la zona sur de Santiago, y puede continuar su caminata en nuestro país”, manifestó el Secretario de Estado en el colorido cumpleaños, tras recordar lo significativo que resulta que se festeje precisamente en septiembre, en el mes de la patria, y el mes en que Chile padeció el golpe de Estado que provocó el destierro del Teatro Aleph y su director Oscar Castro.
«Luego de más de 40 años, el teatro, la cultura y la vida han vencido. El Teatro Aleph está de vuelta entre nosotros. Quiero reafirmar nuestro compromiso en colaborar con que este proyecto siga prosperando, creciendo, para que se haga realidad el sueño de Oscar Castro, de que florezca en todas partes el teatro popular y comunitario”, señaló el Ministro.
En un mensaje en video enviado desde París, Francia, Oscar Castro agradeció al Secretario de Estado por su empeño para que el Teatro Aleph pudiera contar con una sede propia en la Región Metropolitana.
“Es un hombre que está de nuestro lado, del lado de los artistas que buscan compartir su arte con el pueblo, que nos ha dado la posibilidad de vivir lo que ustedes están viviendo allá”, afirma Castro en las emotivas imágenes, en las que rememora su llegada a París como refugiado. Añadió que “la pasión y el amor que he tenido siempre por el teatro, me llevó a cumplir una utopía”: ver funcionar al Teatro Aleph en la capital gala.
El proyecto de remodelación de la casona, diseñado por el arquitecto Marcelo Pizarro, contempla conservar el valor patrimonial del inmueble, y la construcción de una sala de teatro para más de 100 espectadores, espacios multifuncionales, camarines y habitaciones para el alojamiento de actores y actrices que lleguen del exterior.
La compañía de Teatro Aleph nació a fines de la década del sesenta, por iniciativa de un grupo de estudiantes del Instituto Nacional y el Liceo 1 de Niñas. Hacia 1972, el Aleph era considerado por la crítica como uno de los conjuntos teatrales más vanguardistas de la época. Después del golpe de Estado de 1973, el Aleph persistió en presentar sus obras estrenando en 1974 “Y al principio existía la vida” en la Sala del Ángel, con todas las butacas ocupadas. Un mes después la obra fue clausurada.
Oscar Castro y su hermana fueron detenidos y trasladados a distintos centros. Él partió exiliado a Francia, donde se encontró con antiguos integrantes de la compañía, con los que fundó el Teatro Aleph en Europa, el que funciona activamente hasta hoy. Las obras de Castro han sido traducidas a diversos idiomas y puestas en escena en numerosos países. Sin duda, es uno de los más relevantes dramaturgos de la historia del teatro chileno y latinoamericano, y el Teatro Aleph una institución de reconocimiento internacional.
La nueva casa de la compañía en Chile, aunque se encuentra en etapa de remodelación, funciona desde septiembre del año pasado en Eulogio Altamirano 7425, de La Cisterna, donde sus integrantes establecerán un centro cultural que abrirá las puertas a toda la comunidad para desarrollar teatro comunitario y talleres.
Definen su arte como un teatro popular, ciudadano y humanista, el que integra actores profesionales con ciudadanos.
Santiago de Chile, 14 de septiembre 2016
Crónica Digital