La resolución recuerda que la actual Ley de Extranjería -promulgada en julio de 1975- faculta al Gobierno a expulsar e impedir el ingreso de personas que por su actuar o reputación desestabilicen la situación política interna del país.
Por 125 votos a favor, uno en contra y 6 abstenciones, la Sala de la Cámara de Diputados aprobó la resolución 10, que hace un llamado al Presidente de la República a impulsar iniciativas legales que reemplacen el DL de Extranjería, por una norma nacida en democracia, que elimine disposiciones arbitrarias y discrecionales de la autoridad, que atentan contra los DD.HH.
En ese marco, el texto pide promover en las instancias internacionales correspondientes un acuerdo de criterios comunes entre las naciones, tendientes a garantizar el respeto y protección de los derechos de las personas migrantes y extranjeras.
La resolución recuerda que la actual Ley de Extranjería -promulgada en julio de 1975- faculta al Gobierno a expulsar e impedir el ingreso de personas que por su actuar o reputación desestabilicen la situación política interna del país.
La propuesta fue planteada a la Sala por los diputados PC Camila Vallejo, Karol Cariola y Daniel Núñez; DC Gabriel Ascencio; Humanista Tomás Hirsch y Pamela Jiles; y RD Pablo Vidal y Gael Yeomans.
Santiago de Chile, 7 de abril 2018
Crónica Digital/camara.cl
Sáb Abr 7 , 2018
Necesariamente, y más que nunca, la situación de nuestra región la debemos situar en el cuadro de correlaciones de fuerzas a nivel mundial. Mucho menos ahora, no es el momento de “poner notas” a los procesos emancipadores, de izquierda, progresistas o democráticos, especialmente en este momento del mundo, tan marcado por una hegemonía del capital especulativo financiero (EEUU- socios europeos-transnacionales y corporaciones privadas de gran poder en todos los planos). Que además, han llevado al mundo al borde, al peligro real de extinción. Nuestros enemigos usan todos los métodos más brutales: narcoparamilitarismo; Intervenciones militares regulares e irregulares con fuerzas mercenarias; crímenes de lesa humanidad; hegemonía mediática; revueltas supuestamente populares al interior de los países; mucha inteligencia política y socios internos en las naciones. Nuestros adversarios no tienen ética humanista, por eso son extremadamente peligrosos. Contradictoriamente, ellos mismos, se autodefinen los dueños de la democracia, de la libertad, del planeta, y como guardianes defienden y actúan contra los supuestos rivales de “la democracia”. El tema de fondo, esencial , es dónde se ubican las correlaciones de fuerza y con qué dirección. En este cuadro, Rusia, China, los países del Brics, son la contraparte de EEUU, las corporaciones transnacionales y los euros. Irán juega un gran papel. También Siria, que ha resistido. En buena medida Sudáfrica. También la India. Pero, igual son campos en disputa, en cada uno de esos países los norteamericanos y sus socios actúan y tratan de revertir por dentro esos procesos. Nuestra región avanzó mucho, históricamente nunca había logrado tanto avance, con el surgimiento de una oleada de procesos populares y emancipadores en el patio trasero de EEUU: Venezuela; Ecuador; El Salvador; Nicaragua; Bolivia; Argentina; Brasil; con Cuba jugando un papel siempre notable. Todos procesos de lucha social y política, de construcción de mayorías nacionales, y que lograron conquistar gobiernos con elecciones. Por eso es que el proceso chileno, de décadas de luchas, que llegó al gobierno de Salvador Allende y la UP por la vía de luchas sociales y elecciones, se transformó en referente de todo el continente. Esto es lo que ahora, en medio de un cuadro de disputa objetiva por la hegemonía mundial entre dos campos de poder políticos, económico y militar, esencialmente, es lo que trata de revertir el imperialismo norteamericano, porque necesita a su patio trasero bajo su total dominio. En este sentido, y dicho con franqueza, Cuba puede resistir incluso bajo el total dominio de EEUU en el mundo, lo ha demostrado, con un sacrificio y heroísmo de su pueblo notable. Más, ha ayudado sustancialmente a cambiar la correlación de fuerzas en nuestro continente y en el Planeta. Pero, si no existiera la incidencia de China y Rusia en nuestra región, EEUU actuaría con más audacia y brutalidad sobre Venezuela; Bolivia; Nicaragua; Cuba por cierto. Todo sería mucho más cuesta arriba para nuestros pueblos. Por eso, Lula, obrero metalúrgico, primer presidente de un país en donde las clases dominantes mantenían una hegemonía implacable, tiene razón cuando dice que las transnacionales y […]