Por Osvaldo Rodríguez Martínez
Con el «apruebo» al plebiscito por una nueva Constitución en Chile pretendemos crear democracia, declaró Gabriela Rosas, chilena residente en Panamá, donde el próximo domingo funcionará un Colegio Electoral en el Consulado del país andino.
El referéndum es para crear una nueva Carta Magna que nos permita «un Chile más digno por la calidad de vida, que se mejore la salud porque el sistema de salud es pésimo; la educación es desigual y se lucra con la educación», dijo en diálogo con la Agencia Informativa Prensa Latina Gaby, como la llaman sus allegados.
Al enumerar aspiraciones en aspectos que deberían solucionar la futura Constitución, recordó la desigualdad en su país de origen, donde señaló que menos del uno por ciento de la población concentra más del 30 por ciento de la riqueza.
«Chile es el único país del mundo donde el agua está privatizada», señaló al referirse a la necesidad de que la Carta Magna exprese la necesidad de velar por el medio ambiente y denunció que algunos dueños de tierras utilizan de forma indiscriminada el agua para sus cultivos, en perjuicio de comunidades aledañas.
Gaby, como le llaman sus allegados, hizo una disección de la sociedad chilena actual y su funcionamiento bajo preceptos recogidos en la vigente Constitución de 1980, hecha bajo mandato del golpista Augusto Pinochet y por ello la justicia libera u ofrece privilegios carcelarios a los asesinos y torturadores de la dictadura, denunció.
«La democracia se contradice con un modelo neoliberal, porque este responde a los grandes capitales que corrompieron el sistema y todo está en función del comercio», dijo al reafirmar la necesidad de hacer grandes cambios para enrumbar un mejor futuro.
Explicó que hay dos vías para establecer el órgano que redactará la primera ley de la república y son una asamblea constituyente, que ella apoya, o una mixta integrada a partes iguales por constituyentes democráticamente electos e integrantes del actual Congreso.
La explosión social que vivió Chile el pasado año, encabezada por estudiantes, obligó al gobierno a preguntar al pueblo si quiere cambiar la Constitución, opinó y calificó de «impresionante» el resultado de las encuestas que señalan a una mayoría absoluta partidaria del «apruebo».
Solo la «derecha recalcitrante» rechazaría la consulta, según los sondeos, porque otros sectores derechistas también comparten la idea de un nuevo documento que sustituya al anterior creado bajo circunstancias de absoluto dominio militar, dijo.
Resulta importante establecer el concepto de un estado plurinacional y así «reconocer a los pueblos originarios que históricamente han sido extremadamente excluidos y marginados», aseguró la profesora universitaria, quien luchó contra la dictadura de Pinochet y sufrió prisión y tortura en las mazmorras de aquel régimen.
«Así que votar el ‘Apruebo’ es recuperar la democracia y es la única opción que podría acercarnos a una justicia y equidad tan anhelada», en tanto reiteró que sería la posibilidad del sueño de un «Chile feliz», sin discriminación, con justicia social, mejores sistemas de salud y educación: «un Chile digno», sentenció.
Panamá, 23 de octubre 2020
Crónica Digital/PL