Por Cristóbal Chávez Bravo
Chile, los «ojos del mundo», merced a los imponentes observatorios que se afincan en su privilegiado territorio, celebró este jueves la primera década del Día de la Astronomía del país sudamericano, en miras a tener el 55 por ciento de la capacidad astronómica del mundo en 2030.
Al Planetario de la Universidad de Santiago (Usach), que funciona como centro audiovisual de difusión astronómica, uno de los más importantes de la región, se acercaron niños, niñas y adultos durante todo el día para escuchar la charla del representante en Chile de la Organización Europea para la Investigación Astronómica en el Hemisferio Austral (ESO), Luis Chavarría.
El astrónomo explicó, en su charla titulada «Buscando nuevos mundos», que el Telescopio Extremadamente Grande (ELT, según siglas en inglés) de ESO, el telescopio óptico más grande del mundo que se construye al norte del país, permitirá que la nación sudamericana acapare el 55 por ciento de la capacidad astronómica del mundo, según datos de Sociedad Chilena de Astronomía (Sochias).
ELT está instalado en el Cerro Armazones a unos 3.000 metros sobre el nivel del mar, en el desierto de Atacama y cercano al observatorio Paranal, todo en la región chilena de Antofagasta (norte).
Chavarría profundizó que gracias a los avances científicos se han descubierto 5.500 exoplanetas fuera de nuestro Sistema Solar.
«¿Se puede vivir en un exoplaneta? Para eso se construye el ELT», señaló el experto del país sudamericano acerca del telescopio óptico que será el más grande del mundo.
Comentó que la vida en otros mundos ha sido retratada de varias formas a través del cine: desde «Viaje a la Luna», la cinta de 1902 del francés Georges Méliès, considerada la primera obra del séptimo arte de ciencia ficción, o «¡Marcianos al ataque!» (1996), de Tim Burton, que parodia una posible invasión extraterrestre.
«En los planetas no explorados hay seres grandes y chicos», afirmó una niña de aproximadamente diez años, que llenó de preguntas la charla y a quien Chavarría bautizó como la nueva María Teresa Ruiz, la astrónoma chilena más importante de su historia.
Chavarría también apuntó que a partir de octubre de este año, en la nación austral, regirá la nueva norma de contaminación lumínica, establecida por el Ministerio de Medio Ambiente de Chile, la cual tiene como objetivo controlar las emisiones provenientes del alumbrado y letreros exteriores para prevenir la contaminación por luminosidad artificial, protegiendo la calidad astronómica de los cielos nocturnos, la salud de las personas y la biodiversidad en la nación austral.
El miércoles pasado, también en la Universidad de Santiago, la subsecretaria de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Carolina Gainza Cortés, aseveró que esta ciencia ha logrado asombrar a millones de personas en la actualidad.
«Esto ha sido posible gracias al arduo trabajo que han realizado las investigadoras e investigadores, las instituciones científicas y las universidades de nuestro país, quienes posicionaron a la Astronomía como un área de conocimiento relevante y de fácil acceso para toda la ciudadanía», afirmó.
A su vez, el presidente de la Sociedad Chilena de Astronomía, Bruno Dias, indicó que, en los últimos diez años, el número de académicos en astronomía ha crecido al doble.
«Hay tres veces el número de universidades que tienen investigación en astronomía. Todo esto está formando la generación futura. Invito a los niños y niñas: si les interesa la astronomía como carrera considérenla para el futuro», complementó.
El 21 de marzo del año 2014, en el mismo Planetario de la Universidad de Santiago de Chile, se firmó el acuerdo mediante el cual entra en vigor el Día de la Astronomía, festividad que nace con la misión de promover espacios colectivos de creación de conocimiento y divulgación de esta ciencia, según información oficial.
Santiago de Chile, 22 de marzo 2024
Crónica Digital/Xinhua.com
