Aborto, condonación del presidente Joe Biden a la deuda estudiantil y el fracaso de Donald Trump en retrasar su primer juicio penal, marcaron la agenda mediática de Estados Unidos en la semana que hoy concluye.
Amplio destaque tuvo la decisión de la Corte Suprema de Arizona de reflotar una ley de 1864 que prohíbe prácticamente todos los abortos en ese estado.
Las críticas no se hicieron esperar, sobre todo del lado demócrata que tiene focalizado el tema como un movilizador del voto de cara a las elecciones del 5 de noviembre.
La vicepresidenta Kamala Harris viajó este viernes a Arizona donde culpó directamente al expresidente Trump y se lanzó allí a la ofensiva en defensa del derecho al aborto.
Afirmó que es uno de los derechos que están en juego en los comicios de este año, definiendo al exgobernante como el “arquitecto de esta crisis de atención médica”.
El lunes pasado el expresidente dijo en un video que publicó en su red Truth Social que se debe dejar en manos de los estados las leyes sobre el aborto y rechazó una prohibición federal.
En junio de 2022, la Corte Suprema de Estados Unidos derogó el histórico fallo de 1973 de Roe vs. Wade que brindó protección por más de medio siglo a los derechos reproductivos.
Tras la anulación de esa sentencia decenas de estados, sobre todo con legislaturas controladas por republicanos impulsaron y en muchos casos aprobaron leyes restrictivas a esta práctica.
Otro tópico noticioso en los últimos siete días fueron los tres intentos fallidos de Trump de retrasar su juicio penal previsto en Nueva York el 15 de abril y admitió que irá al banquillo.
«El lunes me veré obligado a sentarme, amordazado, ante un juez altamente conflictivo y corrupto, cuyo odio hacia mí no tiene límites», escribió Trump en su plataforma el miércoles.
Esta semana los jueces rechazaron su estrategia de última hora para detener el juicio por la forma en que pretendió pagar por el silencio de la actriz porno Stormy Daniels antes de las elecciones de 2016, con quien tuvo un romance que quiso ocultar.
Trump dijo la víspera a los periodistas que testificaría «absolutamente» en su próximo juicio, en el que deberá responder por 34 cargos de falsificación de registros comerciales en primer grado.
Para el magnate, como señaló repetidamente desde Mar-a-Lago, el juicio es una «estafa». Aquí que el lunes arranca el proceso, que podría durar de seis a ocho semanas, con la selección del jurado.
«Estoy testificando. Digo la verdad, quiero decir, todo lo que puedo hacer es decir la verdad. Y la verdad es que no hay ningún caso», acotó Trump.
Trump es el primer expresidente en ser juzgado en un caso penal. Debe estar en el tribunal todos los días de sesión para participar en su defensa, lo que restringirá significativamente la cantidad de tiempo que dedicará a su campaña presidencial, reportó NBS News.
Washington, 13 abril 2024
Crónica Digital/PL
