Si tuviese que escoger entre sus pasiones sería bastante difícil para Gioconda Belli, amante apasionada de su país, Nicaragua, dibujante del protagonismo de la mujer y encantadora de la escritura.
Poeta y novelista, luchadora antisomocista con el sandinismo, llegó como invitada a la Feria Internacional del Libro de Santiago de Chile (Filsa) para ofrecer charlas y presentar su última obra (El intenso calor de la luna).
En entrevista exclusiva con Prensa Latina, Belli no escondió su buen humor, siempre atemperado, para deslizar sus puntos de vista sobre los tres temas que tal vez más le interesan, junto con un mensaje esperanzador sobre el futuro de la humanidad.
«La Revolución influyó mucho en todo lo que me ha pasado en mi vida, me cambió totalmente. Empecé a escribir a partir de los procesos que coincidieron en el tiempo, a reconocer que debía hacer algo para terminar con la dictadura», afirmó.
Me motivó además a resaltar el papel que la mujer había tenido en la sociedad, su valor y todo esto me provocó la poesía, precisó la autora de Línea de Fuego, Premio Casa de las Américas en 1978.
Belli, que ha transitado a lo largo de una extensa carrera entre poemas y novelas, reconoció que en la batalla contra el somocismo le despertó la conciencia política y la necesidad de ponerlo en palabras.
Sigo sintiendo lo mismo por Nicaragua, aunque haya pasado la etapa digamos épica (…), de hecho hace un año volví a mi país después de estar residiendo en Estados Unidos, por la razón de que me casé con un norteamericano, explicó.
La mujer habitada, de 1988, fue un éxito rotundo internacional, muy en particular en Alemania, donde llegó a vender más de un millón de ejemplares.
Como en muchos de sus volúmenes, no puede faltar la lucha de la mujer en distintos contextos y su mirada comprometida. Pero el más íntimo sin dudas es El país bajo mi piel, memorias de amor y de guerra (2001).
«Me han querido convencer de llevarlo al cine. Sin embargo, me da miedo, es mi autobiografía, buena parte de mi vida, y me dolería mucho que la maltrataran (…), no sé, a lo mejor más adelante», dijo sin evitar risas.
Para responder a otras preguntas de Prensa Latina acerca de sus insistentes denominadores de la mujer, el erotismo, la sexualidad y el amor en sus textos, Gioconda Belli dio una larga explicación.
Yo respeto (y quiero) mucho a los hombres, adelantó sonriente. No es «el tema», sino el punto de vista de la mujer, su voz, su impronta, prosiguió.
No fue hasta el siglo XIX que la mujer ingresó seriamente en la literatura y siempre se ha sesgado su protagonismo en los acontecimientos del mundo. Además, busco dar una interpretación a cada etapa que pasamos en la vida, argumentó.
La escritora nica subrayó que debe dejar de verse a las féminas con una suerte de conmiseración y entender mejor su perfil.
Con tres matrimonios y cuatro hijos, Belli admitió que en la actualidad el orbe transita por caminos sinuosos y necesita encontrar un rumbo que responda a las expectativas de los pueblos.
«Pienso que la literatura prevalecerá, no sé bien en que formato, pero su contenido seguirá marcando pautas, quizás en la búsqueda de nuevos paradigmas. Quizá hasta con un Facebook de los Gobiernos, más participativo y democrático», concluyó.
Por Fausto Triana, corresponsal de Pl
Santiago de Chile, 26 de octubre 2014
Crónica Digital / PL
