Pablo Lorenzini manifestando su preocupación por el retraso del ingreso del proyecto que establecerá el reajuste al salario mínimo y el destino que tendrá, finalmente, el proyecto que modificaba el actual sistema conocido como SIPCO y que quedó sin “piso político”.
Al respecto, agregó que “con toda la legítima presión que existe en torno a los salarios, finalmente el Gobierno ingresará la iniciativa a última hora, le pondrá discusión inmediata y tendremos que votar prácticamente sin debate porque este reajuste debe regir a partir del 1 de julio, mal, la verdad, así no se avanza”.
El parlamentario DC, integrante de la comisión de Hacienda, agregó que “el Gobierno parece no escuchar las demandas que se han planteado en torno al salario mínimo en $250.000, y por el contrario, envían a la Ministra del Trabajo a asustar a los trabajadores con amenazas de rebajas en sueldos o despidos. El Presidente, en su cuenta del 21 de mayo, se vanaglorió de lo bien que está el país y del empleo, pues bien, que se defina y que empiece por mandar el proyecto, lamentablemente así como están los tiempos, será demasiado tarde”.
Por otra parte, el diputado Lorenzini reiteró su preocupación por la situación de los combustibles, recordando que la iniciativa que modifica el SIPCO “quedó sin piso político”. Al respecto, señaló que “después que lo rechazamos en la comisión de Hacienda y que todas las bancadas de la oposición más los independientes notificamos al Gobierno del rechazo, por ser un proyecto que no soluciona el problema de fondo, la iniciativa desapareció”.
Sobre este tema, precisó que “le pedimos al Gobierno, por enésima vez, que disminuya aunque sea transitoriamente el impuesto específico a los combustibles a 4,5 UTM, pero nada, la verdad es que percibimos que el Ministro de Hacienda está complicado y sólo vemos señales erróneas al respecto”.
Por su parte, el diputado DC René Saffirio, tras varias reuniones con sectores sindicales y gremiales, incluyendo a la CUT, sostuvo hoy en la Cámara de Diputados que “efectivamente se ha generado una positiva convergencia en torno a la necesidad de establecer un reajuste digno y que de cuenta de la necesidad de avanzar hacia salarios más justos y éticos, y que permita, efectivamente, salir de la línea de pobreza”.
“El 70 % de las personas que se encuentran calificadas como pobres, tiene trabajo, eso significa que aún contando con contrato de trabajo, disponiendo de empleo formal, no pueden salir de la pobreza, esas son algunas de las inconsistencias del sistema que tenemos que abordar en un debate mucho más amplio”.
Por lo anterior, agregó el parlamentario DC, integrante de la Comisión de Trabajo, “considerando cuales son nuestros objetivos, estimamos que el debate será no menos complejo, pues desde el Gobierno se han enviado otro tipo de señales, especialmente las de la Ministra del Trabajo, destinadas a asustar a los trabajadores para que disminuyan sus expectativas. Yo espero que la ministra se retracte o que el Gobierno explicite que no está en sus planes esta iniciativa de flexibilidad laboral que anunció la titular de la cartera de Trabajo”.
Santiago de Chile, 14 de junio 2012
Crónica Digital / Agencias