Fuerzas militares y policiales apoyadas por voluntarios entablaron hoy fieros combates con el Estado Islámico (EI) en zonas del norte y occidente de Iraq, en particular en Al-Anbar, donde aseguraron ganar terreno a los extremistas sunnitas.
Los preparativos de la ofensiva gubernamental para recuperar el control de Ramadi, capital de la provincia oeste de Al-Anbar, se intensificaron este viernes a raíz de la llegada de refuerzos a la base Ain Al-Assad y el distrito de Al-Baghdadi, en dicha demarcación.
En declaraciones citadas por la agencia noticiosa Alforat, el comandante de las operaciones de Al-Jazeera y Al-Badiya, mayor general Nasser Al-Ghannam, anunció que muchas aldeas y poblados de Al-Baghdadi quedaron bajo dominio del Ejército y las fuerzas de seguridad desde el jueves.
Por orden del primer ministro y comandante general de las Fuerzas Armadas iraquíes, Haider Al-Abadi, se enviaron soldados a las mencionadas zonas y eso ayudó a repeler los intermitentes asaltos de los fundamentalistas del DAESH, acrónimo árabe del EI, indicó Al-Ghannam.
Un portavoz del Comando de la Policía Federal comentó que la jefatura decidió la incorporación a las operaciones militares denominadas «Labaayk Ya Iraq» (En tu nombre, Iraq, en árabe) de 800 combatientes de las Fuerzas de Élite tras finalizar sus entrenamientos en Ramadi y otras localidades.
Algunos de los uniformados llegados como refuerzo son francotiradores, y todos fueron adiestrados en combates callejeros, desactivación de carros bomba y asaltos a cuarteles fortificados.
El Ejército y los voluntarios chiitas de la Movilización Popular (MP) frustraron ayer un ataque de los «takfiristas» (terroristas islámicos sunnitas) a Al-Husaybah, al este de Ramadi, y destruyeron una excavadora que había sido usada para abrir trincheras y luego como carro bomba.
Según el Ministerio iraquí de Defensa, en esas acciones murieron siete islamistas cuando trataban de infiltrarse en las líneas de seguridad de las tropas regulares, además de otros seis que perdieron la vida abatidos por francotiradores mientras colocaban artefactos explosivos en carreteras.
Canales televisivos regionales informaron que milicianos de la MP y policías especiales avanzaron desde Al-Malihah en dirección a Beiji, donde se sitúa una de las mayores refinerías de petróleo del país, y controlaron a su paso varios puestos levantados por el DAESH, además de incautar armas.
Asimismo, se informó que ocho terroristas, incluido un suicida, perecieron en un ataque de las fuerzas iraquíes contra Al-Siniah, en el oeste de Baiji y 40 kilómetros al norte de Tikrit, capital de Salaheddin.
Este viernes, los hombres de la MP se hallaban muy próximos a la refinería de Beiji y a escasos 100 metros de la mezquita Al-Fatah en esa localidad.
Bagdad, 5 junio 2015
Crónica Digital / PL
