Aunque el Gobierno de Chile dejó en claro que el respeto al orden es esencial y que las protestas deben realizarse de forma pacífica, líderes estudiantiles amenazan con recrudecer sus acciones. (PLRadio)
La víspera y durante varias horas hasta el mediodía, jóvenes se enfrentaron a agentes de carabineros al tratar de efectuar una marcha no autorizada por la principal avenida de la capital, la Alameda.
El asunto provocó embotellamientos en el tráfico vehicular, lanzamiento de piedras a la policía, quema de neumáticos por encapuchados y finalmente, nubes de gases lacrimógenos y potentes chorros de agua para tratar de neutralizar la protesta.
La presidente de la República, Michelle Bachelet, comentó que su administración ha enfrentado problemas por construir grandes reformas políticas, en educación, en el sistema tributario, en las relaciones laborales, en probidad, en transparencia.
«Pero le hemos evitado al país las grandes explosiones sociales o la crisis de gobernabilidad que se derivan de no actuar ni querer actuar a tiempo», afirmó en su discurso ante el Encuentro de la Organización Demócrata Cristiana de América.
De forma paralela, el ministro del Interior y Seguridad Pública, Jorge Burgos, respaldó el accionar de Carabineros en su labor disuasiva de los estudiantes de secundaria que pretendían manifestarse en zonas de la ciudad no autorizadas.
Sin embargo, los máximos responsables de las organizaciones estudiantiles en Chile advirtieron que seguirán sus acciones hasta forzar al Gobierno a impulsar una reforma educacional más amplia e inclusiva.
Durante la accidentada marcha, los estudiantes portaban enormes lienzos en rechazo a las demoras de anuncios concretos del Gobierno para hacer efectiva la educación pública de calidad.
El martes un grupo de jóvenes burló la seguridad en el Palacio de La Moneda e ingresó a la instalación de forma violenta, ante la decisión de los estudiantes de radicalizar sus protestas.
«Hace 36 años que no había gratuidad en las universidades de este país y hoy ha vuelto la gratuidad a la educación superior. Son cambios importantes, sin marcha atrás que reflejan un compromiso muy profundo», dijo el vocero oficial del Gobierno.
El secretario de Estado Marcelo Díaz remarcó que la voluntad de diálogo del Gobierno es permanente» y los informes preliminares de la marcha de estudiantes convocadas para este jueves indican que solo estuvo conformada por un grupo reducido.
Como muestra de la voluntad de diálogo, Díaz mencionó que «en el marco de la discusión prelegislativa de la reforma a la educación superior se han sostenido más de 200 reuniones con distintos actores del ámbito educativo y también legislativo.
Santiago de Chile, 27 de mayo 2016
Crónica Digital / PL
