El diario El Mercurio y abogados de personas ligadas a la dictadura de Augusto Pinochet aprovecharon la opinión de un perito para intentar desvirtuar hoy las causas de la muerte del expresidente Eduardo Frei Montalva.
Su hija y exsenadora, Carmen Frei reaccionó a la publicación la víspera del artículo y recalcó que se trata de uno de los tantos peritajes del caso, que se relaciona indirectamente con el presunto envenenamiento del poeta Pablo Neruda.
Con nueve años de diferencia (Neruda en 1973 y Frei Montalva en 1982), ambas personalidades fueron ingresadas en el mismo piso y cuarto de la misma clínica Santa María de esta capital.
Tres de los cuatro médicos procesados por el supuesto crimen de Frei Montalva también atendieron a Neruda. Y la misma enfermera que supervisó a Neruda lo hizo con Frei Montalva, de acuerdo con el abogado Eduardo Contreras.
Contreras, quien conversó con Prensa Latina, es el letrado a cargo de la investigación del expediente del Premio Nobel de Literatura por encargo del Partido Comunista, al cual pertenecía el autor de Canto General.
Carmen Frei, en declaraciones hoy a Radio Cooperativa, relativizó los dichos del tanatólogo español Aurelio Luna, quien puso en duda el envenenamiento con gas mostaza y talio de Frei Montalva, el 22 de enero de 1982.
El estudio proteómico es compatible con una muerte por un shock séptico. No hay presencia de sustancias tóxicas que, por su naturaleza o concentraciones, hayan podido tener relevancia en la muerte de Frei, afirmó Luna.
Creo que lo que publica El Mercurio es, realmente, un abuso de interpretación. Este es uno de los tantos peritajes y diferentes investigaciones que ha hecho el juez Alejandro Madrid, subrayó Carmen Frei.
La exlegisladora afirmó de manera categórica que existen pruebas muy concluyentes, «de que estamos en presencia de un hecho criminal, en que participaron terceros», una idea también reforzada por el abogado Contreras en el caso de Neruda.
En su momento, conocimos que la clínica Santa María fue uno de los pocos hospitales intervenido por la dictadura el mismo 11 de septiembre de 1973, señaló Contreras en la reciente plática con Prensa Latina.
Por su parte, Carmen Frei remarcó que lo expresado por el experto español es sólo una pericia más dentro de un muy extenso proceso.
«Es un peritaje más dentro de muchos otros peritajes que dicen que sí hubo envenenamiento», puntualizó.
Detalló que en una conversación con el doctor Luna, éste le señaló después de la segunda exhumación el pasado año, que lo que quedaba de los restos era poco y se hacía bastante difícil llegar a una conclusión.
Añadió que en el momento en que muere su padre, un equipo de la Clínica de la Universidad Católica, sin autorización de la familia, le introdujeron ocho litros de formalina, que destruyen cualquier cosa, y después se llevaron sus vísceras y las hicieron desaparecer.
Santiago de Chile, 8 de mayo 2017
Crónica Digital /PL
Leí en Ciper (las armas químicas de Pinochet) que existió la posibilidad de administrar a presos políticos y tal vez a frei , cultivos de organismos infectantes ó venenosos (ej.,toxina botulínica) que los químicos Berríos y Poduje , consiguieron( y mantuvieron después en cultivos secretos) desde el instituto bacteriológico y así se explicaria un shock septicémico inducido y graves infecciones y muertes de varios detenidos en esa época.