Sin duda la hoja de ruta del Gobierno de Piñera es “Mentir, Mentir que algo queda” quieren dar la impresión que en el país no pase nada, que todo está tranquilo y el país continua su marcha; Todos podemos comprobar que eso es mentira. Chile arde en varios territorios de la patria, no paran los asaltos, saqueos, llegando incluso a estar en peligro viviendas, donde muchos han tratado de ingresar y causar daño.
Es cierto que en las calles son especialmente jóvenes quienes son protagonista de estas acciones violentas, pero ellos son las principales víctimas del modelo impuesto a sangre y fuego por la dictadura cívico- militar. Los hijos de la clase media o pobre – Ya no hay clase media- tienen su futuro embargado. Ha caído sobre ellos la imposibilidad de un futuro próspero.
Piñera y sus ministros han desarrollado un discurso zalamero, lloroso de lastima, para conmover y desmovilizar el espíritu de lucha de la gente. Lo digno seria la renuncia del Piñera y sus Ministros y llamar a prontas elecciones. No pueden seguir gobernando con más 10 muertos en la conciencia. El funeral de esas víctimas no son las exequias de ciudadanos comunes; Es y debe ser el funeral de Chile. El funeral de la vergüenza de un país injusto que durante el tiempo ha ido acumulando actos corruptos, robos, mentiras, dejar que el gran empresariado haga lo que quiera, sin que ninguna autoridad o miembro de la clase político levante su voz, para defender a los pobres y sufrientes.
Estamos viviendo las consecuencias del “Baile de los que Sobran” al decir de los prisioneros. Por eso no bajan las manifestaciones de protesta, no se cree en quienes nos gobiernan, porque arrastran un prontuario no menor.
Debemos buscar formas de luchas permanente, sin llegar a la violencia; Un camino es la desobediencia civil total, no pagando cuentas usureras, saliendo miles de personas a sentarnos frente a los edificios de gobierno. Seamos capaces de herir lo que más cuidan, que es el poder económico.
Es cierto que hacen falta conductores de estos procesos sociales. No existen los Allende o las Gladys Marín. Los partidos de Izquierda se han domesticados y han entrado en la lógica del mercado, de la derecha. El Partido Comunista desde que llego al poder, asumiendo cargo, fue capturado y ya no tiene la fuerza de lucha, de la calle, de puño en alto. Es cosa de mirar a los congresales comunista, que en nada se diferencias de los pregoneros del poder.
La lucha no debe detenerse. Debe ser esta quien obligue a cambiar de rumbo a quienes nos gobiernan. No bastan migajas para calmar los ánimos. La lucha debe continuar.
Cada uno debe asumir un puesto en esta lucha; Todos son necesarios, los ancianos, jóvenes, trabajadores, mujeres. No es posible que mujeres de la tercera edad, cansadas, deben seguir trabajando para vivir con algo de dignidad.
El funeral de los muertos de estas protestas, deben ser multitudinarios, ocasión de protesta, de duelo y solidaridad con la clase trabajadora.
Tengamos conciencia que cuando el pueblo se levanta, nadie puede detenerlo. No solo es un grito ¡El Pueblo Unido, Jamás Sera Vencido! Es tiempo hoy, ahora de hacer realidad este grito, que acumula historia de lucha en la clase obrara, trabajadora.
Y el Gobierno sigue Mintiendo…………….
Por Carlos Ernesto Sánchez
Escritor
Santiago de Chile, 22 de octubre 2019
Crónica Digital