El titular, en su alocución en video ante el mayor organismo de Naciones Unidas, recalcó que deben respetarse los derechos soberanos de esas naciones.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Belarús, Vladimir Makei, pidió detener ‘las guerras comerciales, las sanciones financieras y económicas arbitrarias como instrumento de presión política’.
La aplicación de esos instrumentos ‘asfixiantes’ de presión sobre los Estados soberanos, incluso sin mirar la situación con la pandemia de la Covid-19, conlleva una amenaza especial y está plagada de consecuencias irreparables, subrayó Makei en su mensaje en video.
Belarús rechaza enérgicamente la práctica de cualquier medida coercitiva unilateral en las relaciones internacionales, dijo y señaló además que un ejemplo sorprendente de tales acciones durante varias décadas es el bloqueo comercial, financiero y económico de Estados Unidos a Cuba.
Desde el inicio del debate general en ONU, el pasado 22 de septiembre, líderes de numerosas naciones del mundo reclamaron en sus intervenciones virtuales ante el plenario de la Asamblea el fin de ese cerco impuesto por Washington a Cuba.
Altos dignatarios de Costa Rica, Venezuela, Surinam, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Bahamas, San Cristóbal y Nieves, y Trinidad y Tobago demandaron acabar con el bloqueo estadounidense a la mayor de las Antillas.
También levantaron sus voces contra ese mecanismo países de África como Kenya, Namibia, Burkina Faso, Guinea Ecuatorial, Santo Tomé y Príncipe, Guinea Bissau, Chad, y Lesoto; pequeñas naciones de Oceanía como Tuvalu, Nauru e Islas Salomón; y Estados de Asia como Timor Leste, Vietnam, y Laos.
Desde 1992, la Asamblea General de la ONU ha aprobado cada año una resolución que condena el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba, y pide su fin.
Pese al llamado de la comunidad internacional, la actual administración estadounidense de Donald Trump ha recrudecido el cerco y adopta nuevas medidas para dañar la economía de la isla, además de atacar la cooperación de los profesionales de salud cubanos.
Naciones Unidas, 27 de septiembre 2020
Crónica Digital/PL
