Pese a los loables esfuerzos del actual gobierno de Alberto Fernández desde que asumió las riendas en diciembre de 2019, con prioridad en el eslabón más débil, en medio de la pandemia, la inflación y el alto costo de la vida sigue poniendo en aprietos a las familias argentinas, con negocios que penden de un hilo y otros que cerraron.
Según un reciente informe del Centro de Estudios Sociales y Acción Comunitaria (Cesyac), en la Argentina de diciembre último se necesitó al menos 120 mil 334 pesos (unos mil 400 dólares al cambio oficial) para que una familia tipo (compuesta por una pareja y dos hijos) pudiera vivir en esta capital.
De acuerdo con la fuente, en el recién concluido y último mes del 2020 se registró un 10 por ciento más de ingresos respecto al mes anterior y en un año, la canasta aumentó 33,7 por ciento.
Mientras el 46,2 por ciento de los hogares porteños con un pareja joven con dos hijos en edad escolar, tienen ingresos por mes de hasta 77 mil 890 (unos 912 dólares), para vivir en la ciudad de Buenos Aires una familia tipo necesitó por lo menos casi 500 dólares más.
A la espera de que mañana el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos difunda los datos oficiales, el informe del Cesyac -del cual se hizo eco el portal Minuto Uno- precisa que el 77 por ciento de gastos de un ingreso en un hogar se destinó a los servicios y mantenimiento del hogar, mientras que el 23 por ciento a alimentos y limpieza.
Precisamente esta semana el Gobierno anunció, entre otras medidas puestas en marcha desde el pasado año, que congeló hasta abril el costo de varios productos de la canasta básica y reforzó el programa Precios Cuidados.
Pese a varias medidas del Ejecutivo, que incluso por decreto prohibió los despidos y suspensiones y congeló las tarifas de servicios básicos, entre otras iniciativas, vivir en esta nación austral para muchos se hace cada día más difícil.
Buenos Aires, 13 de enero 2021
Crónica Digital/PL
