El pueblo de Paraguay elegirá hoy en las urnas el futuro inmediato del país: si llega al fin la propuesta de cambio de Concertación Nacional o sigue perpetuado el Partido Colorado, con casi 76 años en el poder.
Los más de 4,7 millones de paraguayos convocados tendrán 13 alternativas diferentes para decidir por un candidato a Presidente y otro a Vicepresidente.
Las encuestas, cuestionadas en su mayoría por su veracidad, apuntan a la disputa entre esos dos principales binomios rivales, encabezados por Efraín Alegre de Concertación Nacional para un Nuevo Paraguay y Santiago Peña, por la Asociación Nacional Republicana Partido Colorado (PC).
Además de las fórmulas presidenciales, los paraguayos seleccionarán para los próximos cinco años a 45 senadores, 80 diputados, 17 gobernadores, y las autoridades locales.
Las propuestas para Vicepresidente son Soledad Núñez en representación de Concertación Nacional para un Nuevo Paraguay, así como Pedro Alliana, del PC.
En Paraguay no hay segunda vuelta, por lo que el candidato con más votos gana, y según cronograma previsto, el Presidente electo asumirá el cargo el 15 de agosto del 2023, y dejará el mismo en agosto de 2028, sin posibilidad de reelección.
Lo mismo ocurrirá con el otro integrante de la dupla, que ocupa el cargo de Vicepresidente.
Ambos reemplazarán al actual Presidente Mario Abdo Benítez y al Vicepresidente Hugo Velázquez, del PC, que gobiernan desde el 15 de agosto de 2018.
En agosto de 2023 también asumirán los 17 gobernadores electos con sus correspondientes concejales, mientras los senadores y diputados se posesionarán el 1 de julio de 2023.
Según registros oficiales, el proceso electoral de este 30 de abril sería el octavo desde el golpe de Estado que puso fin a la dictadura de más de 35 años de Alfredo Stroessner en febrero de 1989.
LOS DOS BINOMIOS
Los dos binomios que tienen las mayores opciones de alzarse mañana con la Presidencia en Paraguay son los representantes del opositor Concertación Nacional, que abogan por un cambio progresista, y el Partido Colorado, que gobierna casi de una manera ininterrumpida desde 1947.
En total son 13 fórmulas presidenciales, pero los resultados de las encuestas concentran el 70 por ciento de la intención de los votos en estos grandes rivales.
Efraín Alegre, de 60 años, representa a Concertación Nacional, una agrupación que une varios partidos como el Democrático Progresista, el Liberal Radical Auténtico (PLRA), y el Frente Guasú, del expresidente Fernando Lugo (2008–2012).
Abogado de profesión, Alegre se presentó a presidenciales por vez primera en 2013 y quedó en segunda posición con el 37.11 por ciento de los votos y en 2018 con el 43.04 por ciento. Esta vez, asegura, será definitiva.
“Setenta años hemos visto este gobierno. Que nos den una oportunidad a la Concertación y vamos a demostrar que podemos realmente ver el otro Paraguay, el del trabajo, el del esfuerzo, un Paraguay solidario que tenga una respuesta a las grandes necesidades de la gente”, dijo en recientes declaraciones a la prensa. El presidente del PLRA aboga por una nueva política energética, el desarrollo de la industria y el campo, la pequeña agricultura, salud con medicamentos esenciales gratuitos, y por lograr seguridad en la nación.
“Sueño con un Paraguay más justo, más solidario, donde podamos vivir con dignidad y podamos ser felices en nuestra tierra, en nuestra patria”, escribió en su cuenta el Twitter.
Su rival es Santiago Peña, un economista de 44 años y exministro de Hacienda, aspirante del oficialista Partido Colorado, formalmente llamado Asociación Nacional Republicana.
Funcionario del Banco Central y además en la sede del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Estados Unidos, ofrece un discurso de apoyo a las principales problemáticas del país. Impulsar el desarrollo integral de Paraguay mediante el empleo, la inversión en capital humano, salud y educación son sus premisas de campaña.
“¡Las mujeres serán protagonistas de mi gobierno! Con su capacidad y fuerza, vamos a estar mejor”, escribió hace solo unos días en su cuenta el Twitter.
Sin embargo, la campaña ha estado empañada por las denuncias de corrupción de Estados Unidos contra el expresidente Horacio Cartes (2013–2018), quien es su principal impulsor, que condujeron a sanciones y acusaciones de formar parte de la sistematicidad de este fenómeno que vive el país.
Este 30 de abril el pueblo paraguayo decidirá por el cambio progresista de Concertación Nacional, que busca romper la hegemonía del Partido Colorado, o la permanencia de esa organización, empañada, entre otros fenómenos, por una dictadura de casi 35 años.
Asunción, 30 de abril 2023.
Crónica Digital / Prensa Latina.