Por su gran importancia, reproducimos texto completo del pronunciamiento del Frente de Trabajadores de la Democracia Cristiana en que formulan un llamado a votar en contra del texto impuesto por el Partido Republicano y la derecha en el Consejo Constitucional.
Desde el nacimiento de la Falange Nacional y, posteriormente, la Democracia Cristiana, hemos mantenido un compromiso inquebrantable, que tiene que ver con la protección de los derechos sociales, entre ellos, los derechos de los trabajadores y trabajadoras.
El actual proyecto constitucional empezó mal y termina peor, es un atentado a muchos logros obtenidos por los sectores más vulnerables de nuestro país, conseguidos con muchas luchas, en las cuales los DC nos hemos encontrado con las mayorías que se han movilizado, tantas veces.
Es por ello que, haciendo honor a nuestra historia, llamamos a todos los y las trabajadoras del país, a votar en contra de este proyecto constitucional, que solo beneficia a los más poderosos. Curiosamente, como era difícil de suponer, es un proyecto aún peor que la Constitución de la dictadura.
Se limita el ejercicio de los Derechos Fundamentales del Trabajo consagrados por la Organización Internacional del Trabajo.
Se restringe el derecho a huelga, dejándolo solo para los procesos de negociación colectiva; se permite que las instituciones (cualquiera que sea; colegios, centros de salud, clubes, etc.), puedan tener “objeción de conciencia”, lo que es una completa aberración y que solo serviría para discriminar a los que piensan distinto; se retrocede en derechos de la mujer y se abre el camino para que una niña, violada y que quede embarazada, deba llevar ese embarazo a término, entre otras aberraciones.
Se consolida la privatización de la salud, previsión y la educación. Como una forma de cuidar los negocios de los más poderosos, se generan protecciones, llevadas a rango constitucional, de los negocios de las AFP, para que aunque los trabajadores/as pierdan plata, los dueños que mal administran siempre ganen.
Lo mismo ocurrirá con el negocio de las Isapres que, aunque le roben a sus afiliados, siempre se les “rescatará”, como lo pretenden hacer ahora.
Se intenta recuperar el quórum “supra mayoritario” para la aprobación de leyes de contenido constitucional, lo que hace retroceder los avances logrados de 4/7 para modificar disposiciones de ese carácter.
Hace ineficaz la paridad de género en la elección parlamentaria.
Permite la concesión, para negocios privados, a cualquier bien de uso público, lo que permitiría, incluso, concesionar las plazas de los barrios.
¿A alguien le puede parecer posible que un proyecto constitucional, con esta redacción, pueda ser aprobado por algún democratacristiano?
Por supuesto que no.
Por ello, el Frente de Trabajadores de la Democracia Cristiana, requerimos e interpelamos a los órganos directivos de nuestro partido para que prontamente se defina en contra de esta propuesta.
Llamamos a todo el pueblo de Chile y, especialmente, a los hombres y mujeres trabajadoras de la Patria, a organizarse, para votar masivamente en contra de esta propuesta, que retrocede en demasiados logros, que han costado mucho esfuerzo conquistar, a lo largo de la historia, con el esfuerzo de muchas generaciones de chilenos y chilenas que, incluso, dieron su vida para ello.
Con la Unidad Política y Social del Pueblo, como nos enseñara Radomiro Tomic, el 17 de diciembre, todas y todos en CONTRA de esta propuesta constitucional.
Frente de Trabajadores de la Democracia Cristiana.
Imagen: Sitio institucional del Partido Demócrata Cristiano.
Santiago, 28 de octubre 2023.
Crónica Digital.
