A 21 muertos ascendió hoy la cifra de víctimas por un ataque terrorista en una zona chiita de esta capital, mientras el Gobierno iraquí pidió a Estados Unidos ayuda para combatir la ofensiva islamista.(RadioPL)
Fuentes médicas y de seguridad en Bagdad afirmaron que además de otros decesos ocurridos este miércoles, hubo más de 60 heridos, la inmensa mayoría civiles, a causa de la explosión anoche de un carro bomba a la entrada de Ciudad Kadhimiyah, del lado norte de Utaifiyya, y en Ciudad Sadr.
En uno de esos atentados atribuidos a extremistas sunnitas vinculados al Estado Islámico (EI) perdió la vida el diputado por el bloque Badr Ahmad Al-Khafaji, precisó un portavoz de esa agrupación en el Consejo de Representantes (parlamento) de Iraq.
Debido al deterioro de la seguridad en el país, agravada por la violencia sectaria y acciones de grupos «takfiristas» (terroristas islámicos sunnitas), el primer ministro Haider Al-Abadi y el vicepresidente Osama Al-Nujaifi abordaron esos temas con autoridades de Estados Unidos y la ONU.
Al-Abadi recibió ayer en Bagdad al viceasesor de seguridad nacional estadounidense Anthony Pellnkn, con quien discutió los esfuerzos internacionales para ayudar a Iraq en su guerra contra el DAESH, acrónimo árabe del EI, pero se quejó de la insuficiente asistencia militar.
El jefe del gabinete iraquí señaló que el DAESH constituye una amenaza para su nación, la región y el mundo, y pidió a la comunidad internacional ser seria en la lucha contra el extremismo yihadista, así como que Washington cumpla lo antes posible su promesa de armar al Ejército iraquí.
Por su lado, Al-Nujaifi analizó la situación política y de seguridad del país mesopotámico con el representante del secretario general de la ONU aquí, Nikolai Mladenov, y también avaló las acciones de la coalición foránea, pero la urgió a activar su rol para lograr resultados tangibles.
Según un parte del ministerio de Defensa, los insurgentes sunnitas sufrieron duros reveses en las provincias de Diyala y Salaheddin con la muerte de 55 y 50 hombres, respectivamente, como consecuencia de bombardeos de aviones y helicópteros nacionales y estadounidenses.
Reportes emitidos hoy por la televisión estatal indicaron, sin embargo, que el DAESH intensificó sus ataques y atentados con bombas en la provincia septentrional de Nínive, sobre todo en su capital Mosul donde ejecutaron a dos mujeres y arrestaron a seis maestros de una escuela secundaria.
En la misma ciudad, la segunda más importante de Iraq y dominada por los terroristas desde el 10 de junio, cuatro miembros de una misma familia perecieron por la detonación de un artefacto preparado contra una caravana del EI que circulaba por el área de Nahrawan.
Como parte de las escaramuzas de las últimas horas, fuerzas de seguridad aseguraron que dominan la refinería de Baiji, la segunda más grande del país, luego de repeler ataques de los takfiristas desde dos posiciones y con empleo de suicidas a bordo de carros bomba.
Bagdad, 15 de octubre 2014
Crónica Digital / PL
