Detrás de las paredes de la tumba de Tutankamón, en el Valle de los Reyes, es altamente probable que existan dos cámaras selladas, anuncio hoy el ministro de Antigüedades de Egipto, Mamduh El Damati.
Los especialistas del ministerio, detalló El Damati en conferencia de prensa en El Cairo, estiman en un 90 por ciento las posibilidades de que, en efecto, existan espacios vacíos detrás de dos paredes de la cámara mortuoria del Faraón niño.
Los resultados, alcanzados por un sondeo con radar realizado a fines de 2015 por el experto japonés Hirokatsu Watanabe, no son concluyentes, por lo cual deberán refinarse con análisis adicionales que se efectuarán a fines de este mes, agregó el ministro.
Los resultados alcanzados en los primeros sondeos sugieren que en esas «habitaciones» pudieran hallarse objetos metálicos y orgánicos de procedencia aun desconocida.
Tras la pared norte de la cámara funeraria de Tutankamon se hallaría un vacío de 1.5 metros de ancho y unos dos de profundidad, acorde con las imágenes procesadas por Watanabe.
Los sondeos de esa tumba se iniciaron con el propósito de someter a prueba la teoría de egiptólogo británico Nicholas Reeves, quién estima que el sepulcro fue creado a partir de la tumba original de la reina Nefertiti.
Sin embargo, arqueólogos egipcios consultados por Prensa Latina tienen el criterio, a partir de la documentación histórica disponible, de que es altamente improbable que el sepulcro original perteneciera a Nefertiti.
Una tumba real para esa faraona debería tener, al menos, dimensiones equivalentes a las de otras de personalidades similares que existen en el Valle de los Reyes (las cuales alcanzan cientos de metros bajo la superficie).
El tamaño sumamente reducido de la tumba de Tutankamón es atribuido a la premura en su construcción que impuso la prematura muerte del joven faraón.
No obstante, de haber aprovechado una verdadera tumba real preexistente, la cavidad a utilizar para inmortalizar los restos de Tut debería poseer dimensiones mucho mayores, estiman.
Las posibles recámaras ahora identificadas, de comprobarse definitivamente, pudieran ser sólo habitaciones selladas apresuradamente, con restos de los trabajos constructivos en su interior, apuntan algunos especialistas.
El Cairo, 17 de marzo 2016
Crónica Digital / PL