El Parque por la Paz Villa Grimaldi cumplió 19 años de labor, difundiendo la memoria sobre las graves violaciones a los derechos humanos cometidas cuando era un centro de detención de la dictadura. Erigido sobre las ruinas del ex cuartel “Terranova” de la DINA, es hoy un lugar visitado cada año por miles de personas, especialmente estudiantes de enseñanza media y universitarios.
La Corporación que administra el recinto quiso celebrar este nuevo aniversario con un acto íntimo, donde su presidente, el ex preso político Higinio Espergue, señaló una serie de objetivos a concretar con vistas a la conmemoración de los 20 años en marzo del próximo año. Entre las asistentes destacó la presencia de la señora Ángela Jeria, madre de la actual mandataria, ambas sobrevivientes del recinto.
Algo de historia
El 22 de marzo de 1997 se inauguró el Parque por la Paz Villa Grimaldi, tras la lucha de sobrevivientes, organizaciones sociales y políticas de las comunas de La Reina y Peñalolén y personalidades laicas y religiosas relacionadas con la defensa de los Derechos Humanos. Los sigilosos pasos de algunas sobrevivientes que en los años 80 pasaban por su exterior, para reconocer el lugar y verificar sus condiciones, se convirtieron en masivas movilizaciones que finalmente posibilitaron la construcción del Parque. Atrás quedaba la angustia de los sobrevivientes y vecinos del recinto, ante la demolición sistemática de sus instalaciones y el peligro de verlo convertido en un conjunto habitacional.
Carlos Gho, presidente en ejercicio de la Corporación en 1997, señalaba en su discurso inaugural el convencimiento que la institución no pretendía administrar un parque estático, un monumento al olvido o un paliativo al dolor de las víctimas. “La Corporación -manifestó-, debe garantizar que Villa Grimaldi sea un centro que irradie sus principios a la comunidad. Un organismo vivo contra el olvido, contra la impunidad, contra la violencia. Un centro por el respeto, por la dignidad, por los derechos humanos… que demuestre que la violación de estos derechos no es un problema entre las víctimas y los torturadores sino que es la manifestación de un flagelo que alcanza a toda la sociedad”.
En ese mismo acto inaugural, María Isabel Ortega, hablando a nombre de los y las ex prisioneras, caracterizaba el Parque como “un espacio de diálogo y diversidad, de memoria y reencuentro con lo mejor de nosotros mismos” para agregar “esta obra… es un proceso en el que han participado muchos chilenos: los caídos, los torturados, los torturadores y todos los que aquí no quisimos olvidar. Mantener la presencia histórica de nuestro Auschwitz es mucho más que inaugurar un nuevo parque público o comunal: es de hecho un mandato. Un imperativo histórico”.
Casi dos décadas después, la Corporación presenta evidentes avances en ese cometido. El primer sitio de memoria recuperado en América Latina construyò un Archivo Oral, con más de un centenar de testimonios de ex prisioneros y prisioneras que relatan sus biografías y denuncian los crímenes y la tortura. Cuenta también con un archivo documental y de fuentes secundarias que se pueden consultar vía internet y de un Área de Educación compuesta por profesionales jóvenes que se encargan de las visitas guiadas pedagógicas. Dispone además de reconstrucciones de lugares emblemáticos como las celdas y la torre y ha puesto en valor pavimentos originales y vestigios de la casona, los que son preservados por una especialista en la materia.
Junto con los vestigios y reconstrucciones el parque ha sumado diversos memoriales, siendo el principal el Muro de los Nombres que contiene los nombres de personas que pasaron por el recinto y resultaron detenidas desaparecidas o fueron asesinadas. El antiguo jardín de rosas fue recuperado y se convirtió en un memorial, único en su género en el país, donde se rinde homenaje a decenas de mujeres detenidas desaparecidas y ejecutadas políticas del periodo dictatorial. Por su parte, organizaciones políticas de izquierda han erigido espacios donde recordar y rendir tributo a sus militantes.
Villa Grimaldi es también un centro cultural, que dispone de un escenario, el Teatro por la Vida, donde se realizan diversas actividades conmemorativas, se exhiben obras de teatro, de danza y eventos musicales, todos relacionados con la temática de los derechos humanos.
Sin duda el lugar no ha sido un parque estático.
Los nuevos desafíos
En este 19 aniversario, Higinio Espergue, sobreviviente de Villa Grimaldi y actual presidente de la Corporación valoró estos avances en su intervención. “Reconocemos el compromiso y el aporte realizado por los que se la jugaron por recuperar este sitio de memoria y a todos los trabajadores y directores de esta corporación, que durante estos 19 años contribuyeron a su fortalecimiento y desarrollo” manifestó el dirigente.
“Hoy, nuestra Corporación enfrenta nuevos desafíos y para asumirlos necesitamos dar un salto cualitativo y cuantitativo en nuestras diversas áreas de trabajo. Debemos influir a todo nivel para lograr que la educación en derechos humanos se convierta en una política pública permanente. Para esto debemos fortalecer nuestra institución, potenciar las capacidades profesionales de nuestros trabajadores y gestionar ante el Estado la entrega permanente de recursos a los sitios de memoria. Al respecto estamos recopilando todos los antecedentes necesarios para concurrir con planteamientos concretos ya que nos interesa establecer una glosa que de seguridad y continuidad a los proyectos de memoria en Chile”.
Para Higinio Espergue Villa Grimaldi debería avanzar en el proyecto de un Museo de Memoria, para lo cual ya existiría trabajo conjunto con la Facultad de Arquitectura de la Universidad Católica y conversaciones con los municipios de La Reina y Peñalolén. “De igual forma -señaló el dirigente-, postularemos a una señal de televisión digital. El país necesita de un espacio desde donde se difunda la memoria y se contribuya a la convivencia democrática entre los chilenos. Nuestro sitio tiene solvencia ética y moral y la legitimidad nacional e internacional para plantearnos un desafío como este”
Espergue continuó su intervención señalando el interés de la institución por fortalecer la lucha por la justicia, apoyando las diferentes querellas que han interpuesto ex prisioneros y prisioneras de Villa Grimaldi, tanto por tortura como por violencia sexual. “Nos interesa saber el destino de cada compañero y compañera que pasó por acá y que tengan una asistencia jurídica adecuada”.
El dirigente terminó su discurso brindando un homenaje a Teresa Izquierdo, Secretaria General de la Corporación recientemente fallecida, manifestando la voluntad de la Corporación de fortalecer los lazos con todos los museos y sitios de memoria, tanto a nivel nacional como internacional. “La lucha por la dignidad, la memoria, la verdad, la justicia y los derechos humanos es una tarea noble y de todas las organizaciones. El compromiso de la Corporación es continuar fortaleciendo nuestra misión y objetivos para lo cual necesitamos el aporte de todos nuestros trabajadores y de todas instituciones y sitios de memoria para constituirnos en una fuerza capaz de contribuir a un Chile más justo y democrático” concluyó.
Tras las palabras del presidente de la Corporación, los asistentes se trasladaron a la señalética número 1 donde escucharon el testimonio de Rosa Lizama sobreviviente del recinto, luego de lo cual se efectuó una reunión de camaradería en el Teatro por la Vida.
Trabajadoras y trabajadores de la memoria A Constanza Dalla Porta, Licenciada en Historia, recientemente incorporada al Área de Educación de la Corporación le correspondió leer un texto elaborado en base a los aportes de diversos trabajadores, donde señalan el compromiso que los anima. En su parte medular señaló: “Somos trabajadores de la memoria: porteros (as) educadores (as) profesionales que desde sus especialidades colaboran a la propuesta museográfica, la preservación, la reparación de sus instalaciones y vestigios, la actualización de sus archivos y servicios de documentación, las visitas guiadas pedagógicas, la administración y la gestión de sus recursos, todo ello enfocado a la transmisión de la memoria del recinto y de quienes permanecieron secuestrados en sus dependencias. Del relato de sus afanes de resistencia clandestina en contra de una maquinaria implacable, que buscaba aniquilar un proyecto de país y sojuzgar a un pueblo entero”… “Laboramos en un recinto que no es un mero parque memorial, sino una construcción social participativa, inclusiva y reflexiva, que busca generar una conciencia colectiva sobre las graves violaciones a los derechos humanos cometidas por la dictadura cívico-militar, fomentando una cultura de respeto a estos derechos que haga menos probable que se repitan en el futuro crímenes tan brutales como los verificados en este lugar”
“La memoria es futuro, tal es nuestro compromiso”, culminó el dirigente. |
| SaludosEn el acto participaron representantes de diversos organismos vinculados a la defensa y promoción de los Derechos Humanos y autoridades comunales. Entre ellas Angela Jeria, María Luisa Ortiz en representación del Museo de la Memoria y de Gladys Sandoval, encargada de Cultura de la Municipalidad de Peñalolén, También se dieron a conocer diversos saludos por la conmemoración. Entre ellos los de la Presidenta
Michelle Bachelet Jeria: “El Chile que queremos para las futuras generaciones, no es posible cimentarlo si no es sobre la base de la memoria. Por eso, el gran valor de este sitio es poner en el presente la historia de un pasado que quisiéramos -pero no debiéramos- olvidar. Así, le daremos a las futuras generaciones la oportunidad de revisar, reconocer y, ¿por qué no decirlo?, reconocerse en un país cuya identidad ha sido forjada en base al dolor y la sangre de tantos compatriotas que cayeron por luchar por un país más justo y mejor”. Lorena Fries, directora del INDH: “Espero que continúen el trabajo necesario, indispensable de información sobre lo ocurrido en nuestro pasado reciente y de pedagogía en derechos humanos para asumir el presente y cumplir, así, con la promesa de contribuir al establecimiento de garantías de no repetición a las que estamos todos, Estado y Sociedad Civil, obligados y comprometidos” Corporación Memoria Lonquén: “Para nosotros son un ejemplo de rescate de la memoria. Un ejemplo de compañerismo, reflejado en el apoyo que siempre hemos recibido de vuestra parte. Reconocemos en su trabajo una gran vocación por encumbrar la defensa de los derechos humanos como una guía de vida. Vuestro trabajo en educación y memoria nos motiva para seguir nuestro proyecto de sitio de memoria”. Agrupación por la Memoria Histórica Providencia-Antofagasta: “Ingresar a Villa Grimaldi es ingresar a un trozo de la historia de nuestro país que nunca debiese haber sido escrita y, sin embargo, está sellada con tinta indeleble. No obstante el dolor que aquello aún significa para tantos y tantas chilen@s, el parque también es un lugar de contención y de esperanza que la memoria viva impida que estos oscuros hechos vuelvan a repetirse”. Asociación de Memoria y DDHH Venda Sexy: “Han sido ya varios años de compromiso no sólo en la búsqueda de verdad y justicia, sino también en el arduo trabajo de aportar a la construcción de memorias del pasado reciente de nuestro país. Sin embargo, aún nos quedan muchas luchas que dar para construir el país justo y respetuoso de los derechos fundamentales que queremos y sabemos que desde la Villa, otrora centro de crímenes de lesa humanidad, se seguirán dando estas luchas con el mismo ímpetu y convicción que los ha caracterizado hasta ahora”. Santiago de Chile, 25 de marzo 2016 |
