CALLE DEL CENTRO CÍVICO DE SANTIAGO LLEVA EL NOMBRE DE AMANDA LABARCA

Crónica Digital 8 marzo, 2016

Con una ceremonia, a la que asistió la Presidenta Michelle Bachelet, se realizó el cambio de nombre de una de las calles cercanas al Ministerio de Educación y al Palacio La Moneda, la que a partir de hoy se denominará como la destacada educadora y feminista. Como adelantó la alcaldesa Carolina Tohá en la ceremonia, la farmacia popular de la comuna se llamará Eloísa Díaz, como la primera médico de nuestra Casa de Estudios y de Latinoamérica.

«Ella se paseó por aquí todo el tiempo, por la cercanía con la Universidad de Chiley porque su esposo, Guillermo Labarca, fue alcalde de Santiago y ministro en varias oportunidades, por lo que vivían en este sector», contó Rosita Enríquez, nieta de Amanda Labarca, luego de la ceremonia por la que la antigua calle “Almirante Lorenzo Gotuzzo» pasó a llevar el nombre de la primera académica de la Casa de Bello, hito que se materializó por el descubrimiento del nuevo letrero de la calle por parte de la Presidenta Michelle Bachelet; la ministra de Educación, Adriana Delpiano; la ministra del SERNAM, Claudia Pascual; y la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá.

Tras una solicitud de la ministra Delpiano realizada al municipio en enero de este año, y aprobada por el Consejo Municipal, se cambió el nombre que esta calle llevaba desde el 31 de diciembre de 1980, Lorenzo Gotuzzo, en honor al primer Ministro de Hacienda de la dictadura Militar, quien además tiene un monumento en esta calle.

Sobre este homenaje a Amanda Labarca, la Presidenta Michelle Bachelet destacó que “más que la extensión de esta calle, lo importante es que está ubicada en el corazón de nuestro barrio cívico, a pocos metros del Palacio de Gobierno y del Ministerio de Educación”, por lo que “su legado estará mucho más presente cuando pensemos en políticas educacionales, en políticas de inclusión, en políticas de equidad y eso es muy relevante porque su pensamiento, sus ideas, sus enseñanzas, siguen plenamente vigentesy podemos aprender mucho de ellas”.

“Es totalmente coherente y adecuado que en el entorno del Ministerio de Educación haya una calle que se llame Valentín Letelier, y que ahora haya una calle que se llame Amanda Labarca”, destacó el Rector Ennio Vivaldi, agregando que este reconocimiento nos ayuda a traer al presente las ideas de la educadora, pionera en “abrir nuevos rumbos, plantear cosas que en ese momento la sociedad no tenía en absoluto como evidentes, temas tan trascendentes como la importancia de la educación pública, y que la mujer tuviera derecho a voto en todo tipo de elecciones”.

La alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, explicó que este cambio de nombre es “un pequeño gesto de justica hacia las mujeres, en particular, hacia esta mujer extraordinaria, que fue Amanda Labarca”, dada la “ausencia de reconocimiento de las mujeres en los relatos históricos, entre los próceres de la patria, y también en los espacios públicos”.

La ceremonia contó también con la participación de la subsecretaria de Educación, Valentina Quiroga; el Intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego; los diputados Camila Vallejo y Giogrio Jackson; entre otras autoridades.

Amanda Labarca, presente hoy en la Universidad de Chile

Amanda Pinto Sepúlveda, nació el 5 de diciembre en Santiago en 1886. Adoptó el apellido Labarca tras casarse con Guillermo Labarca Hubertson. En 1905, a los 18 años, se tituló de profesora de Estado con mención en Castellano de la Universidad de Chile, institución donde posteriormente fue la primera mujer académica, convirtiéndose así en la primera de Latinoamérica.

Educadora y luchadora por los derechos de las mujeres, entre ellos, el derecho a sufragio, fue la creadora de las Escuelas de Temporada de la Universidad de Chile por las que académicos de la Casa de Bello se movilizan a distintos puntos del país o en la misma capital para impartir sus conocimientos a distintos sectores, tradición que continúa hasta nuestros días. Murió en Santiago el 2 de enero de 1975, a los 88 años de edad.

La Universidad de Chile recuerda a Amanda Labarca a partir de hitos como la entrega desde 1976 de un premio que lleva su nombre, que tiene como objetivo destacar la personalidad y la obra de las mujeres universitarias; y de la Cátedra Amanda Labarca, creada el 2015 por la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones, a partir del trabajo de la Oficina de Igualdad de Oportunidades de Género. Este espacio académico tiene por objetivo generar conocimiento, difundir y formar profesionales en la temática de género.

Santiago de Chile, 8 de marzo 2016
Crónica Digital / uchile.cl

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Opinión

Por Diego Ancalao: LA POLÍTICA QUE TENEMOS Y LA QUE NECESITAMOS

Mar Mar 8 , 2016

“El país está siendo testigo del amplio desprestigio de la política y de su dirigencia y que radica en las malas e irregulares acciones perpetradas por quienes ostentan el poder. Sin embargo, hay que separar la paja del trigo, porque cuando se habla de la comisión de ilícitos, no todos los políticos están involucrados, lo que hace necesario que seamos capaces de defender la política, como actividad y no a los políticos. Todos los que viven en la polis son políticos, a menos que sea una bestia o un Dios, decía Aristóteles. Lo que pasa es que, la mayoría, son políticos ineficientes que dejan en manos de unos pocos, el futuro de muchos. En medio de este escenario de desconfianza hacia los políticos, se dan señales que, equivocadamente, fomentan la falta de credibilidad. Dos ejemplos concretos: en el marco de la investigación de los casos PENTA y SQM, escuchamos al director del Servicio de Impuestos, Fernando Barraza afirmar que no es trabajo de la entidad presentar querellas, mientras hace unos meses el Fiscal Regional de Valparaíso, Pablo Gómez aseguró que no iban a existir penas efectivas. ¿De qué estamos hablando? La ciudadanía espera que los hechos se investiguen, que se determinen las responsabilidades y que sean castigados quienes utilizaron el poder para beneficiarse. A esa situación se suma el reciente rechazo de la Cámara de Diputados, en el inicio del trabajo parlamentario de este 2016, del proyecto que permitía que los dirigentes sociales postulen a un escaño en el Congreso. ¿Acaso, ésa no es otra estrategia para impedir el derecho a reclamar, desde el Parlamento, las injusticias que se cometen contra los que han sido postergados y no tienen representación en la toma de decisiones? Ésta ha sido una muestra más de la crisis del sistema político chileno, la vieja partidocracia que administra la democracia y al Estado, pensada para excluir al pobre, al campesino, al dirigente social y a los pueblos indígenas. La Administración de los poderes del Estado tiene que practicarse de manera democrática y la democracia es el poder para la mayoría, es decir, para el pueblo. Sin embargo, hoy, pareciera que no es para la mayoría, que la democracia está capturada por una minoría económica que maneja a una minoría política y como directa consecuencia, los ciudadanos no son tomados en cuenta en las decisiones sobre su propio futuro, porque no están representados y se les ha negado que se representen. Es, precisamente, esa minoría la que fija lo que el pueblo quiere y es la que educa a la ciudadanía, según lo que ellos estiman necesario y, eso, es lo que ha llevado a que la desigualdad se mantenga, que la educación de calidad sea sólo para algunos. Es, además, imposible cambiar la política, sino cambiamos a los políticos, por lo tanto, la necesidad de defender la política está íntimamente ligada con cambiar los políticos y ésta también es una responsabilidad de quienes los eligen, a través de su voto, muchas veces condicionado a ciertos beneficios, como el […]