La virtual candidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, enfrenta hoy un fuerte reto tras el endoso recibido el martes del senador Bernie Sanders, y debe mejorar su mensaje y aceptación entre los electores.
Según el diario The Wall Street Journal, con el cierre de la pesquisa del Buró Federal de Investigaciones sobre su servidor de correo electrónico privado, es hora de que la verdadera Hillary Clinton se muestre para encontrar su ritmo y su voz.
La víspera, Sanders le ofreció un muy esperado respaldo, pidiendo unidad a casi dos semanas de la Convención Nacional Demócrata y prometió hacer lo que pueda para ayudarla a ganar al virtual nominado a la presidencia por el Partido Republicano, Donald Trump.
Según Sanders, la aspirante de los azules es la mejor candidata, con mucha más ventaja que otros, para llegar a la Casa Blanca.
Durante gran parte de su discurso en New Hampshire, la fémina adoptó muchas de las causas de Sanders, prometiendo oponerse a tratados como el acuerdo transpacífico de libre comercio, pelear para subir el salario federal mínimo y reformar el sistema financiero de campañas.
Fue solo un acto de reorientación en el que se puso de manifiesto la necesidad de la aspirante de profundizar más en su campaña, pues la historia de las encuestas de opinión pública muestran que ningún demócrata llegó a la elección presidencial con las puntuaciones más débiles en la popularidad personal, la confianza o la simpatía que Clinton.
Según la opinión que publicó el Journal «todavía hay tiempo para que Clinton se convierta en un candidato fuerte y popular», pues condiciones y resultados de liderazgo no le faltan.
Cuando ella comenzó su búsqueda de la presidencia, agregó, su calificación favorable fue del 44 por ciento positivas y 40 por ciento desfavorable.
Sin embargo, ahora su calificación favorable es de 33 por ciento y 55 por ciento desfavorable, y esos resultados desfavorables son aún mayores entre las mujeres blancas (57 por ciento) e independientes (59 por ciento).
También sus puntuaciones de confianza y simpatía están al revés, con muchos más estadounidenses que tienen una sensación negativa que positiva hacia ella.
En la carrera por la Casa Blanca un sondeo de NBC News/Survey Monkey encontró la víspera que dos tercios opinaron que Hillary no es honesta ni confiable, a la vez que el 62 por ciento tiene una opinión desfavorable de Trump, dos puntos más que los que tienen esa opinión de Clinton.
Honestidad y confiabilidad son dos de los principales retos que hoy enfrenta la demócrata para poder convertirse en el 45 presidente de Estados Unidos.
Washington, 13 julio 2016
Crónica Digital / PL
