Por Juan Andrés Lagos: COLOMBIA: LA BATALLA POR LA PAZ CONTINUA INTACTA

Por un estrecho márgen, y con una abstención de sobre el sesenta por ciento (que no es extraño en Colombia), se ha impuesto un rechazo temporal al Acuerdo de Paz impulsado por el gobierno del Presidente Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC-EP.

Tanto el gobierno como las FARC han señalado, sin demora, que mantienen intactas sus voluntades por seguir adelante con el proceso de paz. Este punto es clave para el futuro del proceso.

De la misma forma, los países que han acompañado y han sido garantes: Cuba, Noruega, Chile y Venezuela, han declarado su decidido apoyo al proceso.

Las Naciones Unidas, muchos países de la Unión Europea, El Papa y El Vaticano, entre otras personalidades e instituciones mundiales, han reiterado su apoyo a un proceso que han generado grandes esperanzas en el continente americano, y en todo el mundo, convulsionado por cruentas guerras de intervención y estrategias desestabilizadoras de los estados nacionales.

Todo esto, es y será muy importante.

Sin embargo, el caso colombiano, y en particular el resultado del reciente plebiscito, muestran que, finalmente, los procesos de esta magnitud se definen en los propios países, con la participación (u omisión) de sus propios pueblos.

Repetimos, con una altísima abstención, que no es algo extraño en los procesos electorales y de consulta ciudadana en Colombia, se ha impuesto el no al Acuerdo de Paz. En las zonas en donde territorialmente el conflicto armado ha tenido su mayor presencia, el sí a la paz ganó ampliamente.

En las regiones campesinas y en algunas ciudades grandes de Colombia, más distantes de los efectos directos, se impuso el no al acuerdo.

El mayor rango de rechazo a la paz fue en la zona fronteriza con Venezuela, en donde hay situaciones sociales y económicas que han golpeado severamente al pueblo pobre de Colombia.

El Acuerdo de Paz suscrito por las partes, es efectivamente una carta programática nacional que genera, en primer lugar, el fin de la guerra armada. Para una nación que ha vivido ese drama por décadas, con centenares de miles de víctimas, esto no es un hecho menor. Es crucial.

Pero, también el Acuerdo incluye el evidente mejoramiento de prácticamente todos los estándares de la democracia representativa de Colombia: Inclusión social; reforma agraria en aspecto acotados, pero relevantes; inclusión política y participación ciudadana; consideración de mejores niveles en ámbitos de género, infancia, juventud; batalla en contra del para militarismo y el narcotráfico.

Por tanto, este proceso propone, efectivamente, un cambio cualitativo de la democracia de Colombia.

La posición de quiénes impulsaron el rechazo, encabezados por Uribe (un gran amigo político de sectores importantes de la derecha chilena), tuvo contenidos que es muy importante considerar hacia el futuro.

1) Apoyados por los grandes medios colombianos (y algunas cadenas transnacionales), plantearon que el Acuerdo generaría más violencia; más polarización; más poder para las FARC-EP.

2) Generaron la idea de que el Acuerdo provocaría mucha incertidumbre social y política, especialmente en las zonas en donde territorialmente se ha producido el conflicto, y que, eventualmente, tal situación se trasladaría a las zonas urbanas y campesinas en donde actualmente casi no hay enfrentamientos armados.

3) Representaron, explícita e implícitamente, a los sectores paramilitares y a los carteles del narcotráfico que, hasta ahora, disputan y controlan zonas que los confrontan con el poder del estado nacional colombiano. Y que están al acecho respecto del “vacío” que podría generar el Acuerdo en relación a los territorios hasta ahora controlados por las FARC-EP y el ELN.

4) Buscaron instalar la idea de la impunidad, muy apoyados por instituciones y ong’s financiadas por “fundaciones” norteamericanas.

Estos planteamientos fueron la base del sector que impulsó el no al Acuerdo, y que ahora ha salido temporalmente fortalecido, y sin duda alguna buscará ejercer su poder y su incidencia en los pasos que se den ahora. Este sector ha buscado, siempre, una salida militarizada al conflicto de Colombia, no política; tiene influencia grande en el Ejército de ese país; sus relaciones con el narcotráfico; el para militarismo y el sicariato son de marca mayor.

Pero, el dato clave de esta situación, es algo que este sector derechista y anti paz ha sabido camuflar muy bien: El Acuerdo no propone la impunidad (y ellos lo saben muy bien), lo que propone es avanzar en Justicia Transcisional y esclarecer delitos de lesa humanidad en Colombia. Y si eso ocurre, las grandes bandas del paramilitarismo; del narco; y el propio Uribe, quedarán mucho más al descubierto en sus permanentes afanes de guerra; crímenes y control económico-territorial de parte del estado colombiano. Ellos han sido los principales protagonistas de esos delitos.

Por eso, el propio Uribe ha salido rápido, ahora, ha mostrarse como un promotor de la paz, y ha señalado, casi explícitamente, que está por un acuerdo de “reconciliación”.

Este mismo sector ha buscado, también, internacionalizar el conflicto, en primer lugar con Venezuela, pero también ha hecho intentos con Ecuador y otras naciones. Es la estrategia de guerra del imperialismo norteamericano, llamada como la “balcanización”, y que se ha tratado de impulsar en Bolivia y otros pueblos de nuestra región. Se trata de parte de la misma táctica que busca derribar todo lo avanzado en América (sin la presencia de los Estados Unidos), en procesos emancipadores, y especialmente en integración, con CELAC; ALBA; UNASUR; MERCOSUR; CARIBE-CENTROAMERICA.

En estas horas cruciales, las fuerzas democráticas del continente deben involucrarse mucho más de lo que lo han hecho. Efectivamente han estado presentes, pero tal vez de una manera mezquina, limitada, poco incidente. Ahora es más evidente que el destino de Colombia es, en buena parte, el destino de toda la región.

Este resultado ha mostrado que estos procesos exigen y requieren mucho más acción en la base social. Más información; más y más trabajo cara a cara, en el territorio, con todas las dificultades que eso implica en Colombia. Mucha gente en esa hermana nación ha reaccionado por el miedo, la incertidumbre instalada.

Finalmente, hay que estar muy atentos. Este escenario es propicio para provocaciones y acciones armadas y delictuales en contra de quienes han apostado a la paz.

Por: Juan Andrés Lagos, integrante del Grupo de Amigos por la Paz en Colombia.

Santiago de Chile, 3 de octubre 2016
Crónica Digital

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Next Post

MINISTRO DE BIENES NACIONALES ANUNCIA RUTA PATRIMONIAL ARCHIPIÉLAGO DE JUAN FERNANDEZ

Lun Oct 3 , 2016
El ministro de Bienes Nacionales, Víctor Osorio, y el rector de la Universidad de Valparaíso, Aldo Valle, anunciaron hoy el inicio de los trabajos para el estudio, rediseño y habilitación de la nueva Ruta Patrimonial Archipiélago Juan Fernández, la cual se desarrollará gracias a un convenio con la Casa de Estudios. “Esta iniciativa se inscribe en el programa de fortalecimiento del Programa Nacional de Rutas Patrimoniales de la Secretaria de Estado”, indicó el Ministro Osorio, en la ceremonia realizada en las dependencias de la Universidad de Valparaíso, a la cual asistió asimismo el Gobernador Provincial, Jorge Dip; el Seremi Rodrigo Vergara; el Decano de la Facultad de Arquitectura, Juan Luis Moraga; y el Director de Vínculos, Alejandro Rodríguez. El Ministro explicó que “la Ruta Patrimonial Archipiélago Juan Fernández – Isla Robinson Crusoe fue habilitada el 2003 y operó hasta el 2010. Sin embargo, producto del terremoto y posterior tsunami que afectó duramente a Robinson Crusoe el recorrido y la señalética se vieron destruidas”. En este sentido, en el contexto del Programa de Recuperación y Fortalecimiento de Rutas Patrimoniales, “se adoptó la decisión de actualizar y rehabilitar el recorrido, para fortalecer y mejorar la infraestructura turística de la isla y aportar a la puesta en valor de un territorio que, mayoritariamente, es propiedad del Fisco”. “Nuestro propósito es generar condiciones para el acceso ciudadano al territorio y aportar a las economías locales de la Isla Robinson Crusoe”, explicó. El Seremi Vergara manifestó que el proyecto se materializará a través del trabajo conjunto con la Universidad de Valparaíso, “que a través de de la Dirección de Vínculos y Relaciones Internacionales, en conjunto con las carreras de Diseño y Gestión en Turismo y Cultura de la Facultad de Arquitectura, asumirá la tarea de realizar el rediseño de este recorrido”. El rector de la Universidad de Valparaíso señaló que “el acuerdo del Ministerio de Bienes Nacionales con nuestra Casa de Estudios Superiores constituye una oportunidad propicia para mostrar la contribución de dos entidades públicas a la puesta en valor del territorio y la cultura”. Añadió que “este será un hermoso trabajo de reconstrucción cultural, basado en la tradición oral y el imaginario popular de Juan Fernández, y en el enaltecedor objetivo de reconocer a su comunidad”. En las inmediaciones del Pacífico Sur existe uno de los ecosistemas más singulares del planeta: el Archipiélago de Juan Fernández, que fue declarado Reserva de la Biosfera por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en 1977. Es un conjunto de islas ubicado a más de 670 kilómetros de América del Sur. Lo componen las islas Robinson Crusoe (antiguamente Más a Tierra), Alejandro Selkirk (Más Afuera), el islote Santa Clara e islotes menores. La isla posee una flora y fauna endémica entre las que destacan el picaflor rojo de Juan Fernández y especies marinas como el lobo de mar de dos pelos y la langosta, principal recurso que sustenta la economía de la isla. La flora destaca por conformar 126 […]

Te puede interesar:

Las opiniones vertidas en este medio de comunicación no necesariamente representan el sentir de Crónica Digital y son de responsabilidad de quienes las emiten.

Crónica Digital, es un medio de comunicación social, republicano y comunitario. Fue fundado el 19 de abril del año 2005. Su objetivo periodístico es informar sobre los principales noticias de Chile, América Latina y el mundo.

El director de Crónica Digital es el periodista Marcel Garcés Muñoz.

Su representante legal y editor general es el periodista Iván Antonio Gutiérrez Lozano.

El editor nacional es el periodista Ramón Vargas Vega.

El editor cultura es el periodista Miguel Alvarado.

Corresponsal en La Habana, Cuba, Florencia Lagos N.

El asesor legal es el académico y abogado Sr. Pablo Méndez Soto.

Los principales asociados informativos de Crónica Digital son la Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina , la agencia de noticias China, Xinhua y TV Brics.

En Chile, el medio electrónico El Maipo

Correo: cronicadigital@gmail.com
Dirección: Maturana 302 local 2
Santiago de Chile.

Desde el año 2005 Crónica Digital es parte de la Asamblea Nacional por los Derechos Humanos.

Crónica Digital es una marca registrada. Todos los derechos reservados.

Redacción Diario Crónica Digital
Fono: 950142601

Un café en una plaza con historia....

Maturana con Huérfanos
plaza Brasil,
Santiago de Chile.

La imagen tiene un atributo ALT vacío; su nombre de archivo es cafe-con-torta-900x675.jpeg