El volante de contención del Bayern Munich tiene un papel más ofensivo con Chile. Para darle más color a la película, se dijo que tenía amigdalitis y se fue a la cancha también con molestias musculares.
‘Así son los grandes, Arturo (Vidal) nos dio una victoria que necesitábamos mucho’, comentó el técnico Juan Antonio Pizzi, quien fue otro de los que respiró hondo tras los descalabros ante Ecuador y Paraguay, y el empate con Bolivia.
La Roja tiene ahora 14 puntos y sigue en séptimo lugar en la tabla de posiciones, pero no muy lejos de los que hoy estarían clasificados para la cita de Rusia, a la sazón, Brasil (21), Uruguay (20), Ecuador (17), Colombia (17) y Argentina (16).
Paraguay acumula 15 unidades y es otro de los que rescata las perspectivas de alcanza un cupo en el largo calendario sudamericano, mientras Argentina anda de capa caída si Lionel Messi.
La próxima fecha del torneo será en noviembre y promete grandes emociones. Colombia enfrenta a Chile en la temida Barranquilla por el calor; choque de trenes en el clásico Brasil vs Argentina en tierras del gigante sudamericano.
Además, el rejuvenecido Paraguay frente a un Perú que ya no tiene esperanzas de clasificación; Uruguay que recibe a Ecuador y sin atractivos, Venezuela se medirá a Bolivia.
Lo de Chile, el doble monarca de la Copa América, dejó la sensación de que todavía tiene gasolina para ir a más. Sin embargo, tiene que hacer méritos para convencer en la cancha.
Luego de ir con relativa facilidad 1-0, incluso con la posibilidad de aumentar la ventaja en los primeros minutos del segundo parcial, Chile comenzó a ceder al balón a un necesitado Perú que después de tres amagos, consiguió el empate.
Fue a los 75 minutos en una jugada extraña. Edison Flores atacó por el centro y muy marcado sorprendió al guardameta Claudio Bravo con un disparo con la punta del zapato izquierdo que silenció a 38 mil hinchas en el estadio Nacional.
En medio de la desazón de los chilenos, Perú se metió de lleno en el partido con la determinación de ganarlo, aunque la firma de un abrazo 1-1 se antojaba el mal menor para ambos.
Hasta que reapareció Vidal, autor del primer tanto a los 10 minutos y con muchos problemas físicos, dio batalla en el momento justo: pase de Mauricio Isla, desborde por el centro y zurdazo rasante que dejó sin posibilidades a Pedro Gallese.
Por Fausto Triana
Santiago de Chile, 12 de octubre 2016
Crónica Digital / PL
