Un acuerdo pactado el 30 de diciembre pasado entre Rusia y Turquía prevé un patrullaje permanente de las unidades del Centro ruso de reconciliación para Siria para velar por el cumplimiento de la tregua, señala la comunicación.
Para evitar la violación del régimen de fin de hostilidades, una de las unidades del referido centro estará ubicada en las afueras de Afrin, en una zona de separación de los destacamentos kurdos y el llamado Ejército de Liberación de Siria, bajo control turco, explica.
La aclaración del Mindef está relacionada con una versión de la prensa occidental sobre la presunta edificación de una base militar, donde, además, recibirían entrenamiento los insurgentes kurdos.
Moscú, junto a Ankara y con el visto bueno de Teherán, copatrocina conversaciones en Astaná entre dirigentes de las formaciones armadas y representantes del gobierno sirio, en un formato donde solo participan las partes beligerantes, sin partidos políticos opositores.
Rusia cuenta con la base aérea de Jmeimin, en la provincia de Latakia, y una base naval en el puerto de Tartús.
Moscú, 20 de marzo 2017
Crónica Digital /PL
