El incremento de la cooperación con Chile en diferentes facetas recibió hoy gran destaque en los medios haitianos como resultado de la breve visita realizada a este país por la presidenta del país austral, Michele Bachelet.
Durante su corta estancia anoche la estadista visitó dos bases militares de las fuerzas de paz chilenas de la Misión Militar de Naciones Unidas en Haití (Minustan) en Cabo Haitiano y Puerto Príncipe.
También mantuvo conversaciones con la jefe de la misión de la ONU, Sandra Honoré, poco antes del repliegue del componente militar de la Minustan.
Naciones Unidas se propone sacar a los dos mil 370 soldados destacados en este país (de los cuales 340 son chilenos) y poner fin a esa misión militar en octubre, pero dejará 300 de los mil policías internacionales desplegados en la nación caribeña.
Durante su breve estancia en Haití, la mandataria chilena también conversó con su homólogo Jovenel Moise, y con el primer ministro Jack Guy Lafontant.
El presidente haitiano manifestó su deseo de trabajar con Chile para ampliar, profundizar y robustecer las relaciones políticas.
Moise, a su vez, aprovechó el encuentro para presentar su visión del desarrollo de Haití, las áreas prioritarias de su administración y los principales objetivos que se propone alcanzar durante estos cinco años como parte de su compromiso de ofrecer soluciones sostenibles a los problemas del país más pobre de América.
Otro tema discutido por las partes fue el migratorio, pues han viajado a Chile más de 60 mil haitianos en los últimos cinco años, muchos de ellos jóvenes que culminaron aquí sus estudios básicos y ahora son necesarios para la economía local.
Una fuerte migración de haitianos a Chile y Brasil comenzó después del terremoto del 2010 y se intensificó en los últimos años al abrirse oportunidades laborales y de estudios en esos países.
Al respecto Moise hizo hincapié en que los dos gobiernos firmaron un acuerdo para que universidades chilenas certifiquen los estudios en Haití.
Si inicialmente Chile y Brasil fueron un tránsito para los inmigrantes haitianos que deseaban llegar a Norteamérica, en la actualidad su presencia en esos países pasa a considerarse un refugio a causa del endurecimiento de la política migratoria de Estados Unidos, recordó Radio Metropole.
Moise aseguró que los gobiernos de ambos países continuarán las conversaciones con miras a mejorar las condiciones de vida de los migrantes haitianos.
Por otra parte, Bachelet y Lafontant reinauguraron la Escuela Nacional República de Chile, un edificio de tres niveles destruido por el terremoto del 12 de enero de 2010, reconstruido con financiamiento de la Agencia de Cooperación de Chile.
En tanto el presidente del senado haitiano, Youri Latortue, reveló que durante la visita de Bachelet se pidió cooperación bilateral para que Chile pueda dejar algunos equipos a los militares haitianos y formar a jóvenes soldados, como hizo Ecuador.
Debemos desarrollar capacidad nacional para que cuando haya incendios, huracanes y terremotos, Haití pueda trabajar en espera de ayuda internacional, dijo Latortue.
Se refirió al ejército desmovilizado en 1994 por su implicación en varios golpes de Estado, pero reorganizado por el expresidente Michel Martelly (2011-2016), aunque con un número muy reducido de miembros.