El secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Energía (CNE), Luis Sánchez Castellón, insistió en que el abastecimiento para todos los chilenos que reciben gas natural en sus casas «jamás ha estado en riesgo» y no debe ser tema de preocupación.
«Hay un compromiso formal entre los gobiernos de Chile y Argentina en esa dirección, por razones no sólo de seguridad, que son completamente obvias, sino también por compromisos que se han ido construyendo en este trabajo conjunto», apuntó.
Explicó que las autoridades de ambos países tratan de mantener el máximo de normalidad posible en los suministros, afectados por la incapacidad de los productores argentinos para atender la demanda interna de ese país.
Los recortes en el suministro de gas hacia Chile alcanzaran ayer los 700 mil metros cúbicos, monto equivalente al 32 por ciento de la demanda total de sus usuarios y al 43 del consumo de clientes industriales.
Por esta razón, 235 industrias, la mayoría medianas y pequeñas, se vieron afectadas con cortes totales o parciales del combustible.
Sánchez Castellón hizo estas declaraciones tras arribar desde Buenos Aires, donde se reunió con autoridades trasandinas para analizar el tema.
Santiago de Chile, 24 de febrero 2006
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