Antonia Fortt, ingeniera ambiental de Oceana y encargada de la campaña de contaminación, indicó que aunque la aprobación del proyecto es lamentable, se trata de una decisión previsible. Las señales del gobierno y de la Concertación estuvieron desde un principio a favor de Barrick: por eso se firmó en el gobierno de Frei un protocolo específico para Pascua Lama y adicional al tratado minero chileno-argentino; por eso Lagos permitió la presentación de un plan de manejo de glaciares durante su gobierno e hizo la vista gorda a una serie de irregularidades del proyecto, como la firma de un acuerdo externo entre una parte de los afectados, por 60 millones de dólares siempre y cuando no hicieran objeciones a la propuesta, dijo Fortt.
Marcel Claude, director ejecutivo de Oceana agregó por su parte que la administración Lagos dejó en herencia a Bachelet la aprobación de este proyecto, para no verse salpicado por los efectos de una decisión que seguramente sería impopular, dado el rechazo que tiene Pascua Lama entre la ciudadanía. Claude explicó además que resulta sospechoso que esta aprobación se realice en medio de una semana altamente noticiosa, cuando la atención pública está todavía puesta en el movimiento secundario o en el mundial de fútbol.
El economista recordó también que Bachelet se comprometió frente al país en su discurso del 21 de mayo a que ningún proyecto de inversión podrá pretender hacerse rentable a costa del medioambiente. Para Claude, este compromiso ha sido vulnerado en menos de un mes con la aprobación de Pascua Lama, lo que abre serias dudas sobre el valor de la palabra de la Presidenta.
En cuanto a los riesgos ambientales y sanitarios que implica el proyecto minero, la ingeniera ambiental de Oceana indica que lamentablemente no bastó con nuestra advertencia, ahora tendremos que esperar a que se dañe la salud de las personas del valle para que las autoridades chilenas comiencen a pedir nuevos estudios y comisiones investigadoras. Esta vez no serán cisnes muertos como en Valdivia, esta vez se va a tratar de personas. Finalmente, respecto a la acogida de sólo dos reclamaciones de las 46 presentadas por distintas organizaciones y vecinos del valle, Fortt explicó que esto refuerza la idea de que la aprobación de Pascua Lama es un absurdo legal y una traición a la voluntad ciudadana de los vecinos del Valle del Huasco.
Mirna Inostroza, microempresaria turística de Vallenar y una de las voceras del Comité de Defensa del Valle del Huasco, explicó que en la agrupación ciudadana teníamos claro que es un tema político pero aquí la lucha no se detiene. Sabemos qué piensa el Gobierno y ojalá que un Ministerio de Medioambiente haga cosas concretas para no seguir regalando los recursos naturales de Chile. Los microempresarios de turismo estamos perdiendo y también se va a perder la cultura que podríamos entregar a las nuevas generaciones.
Santiago de Chile, 14 de junio 2006
Crónica Digital
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