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GOBIERNO ANUNCIA 15 NUEVAS PATOLOGÍAS EN PLAN AUGE

Crónica Digital 28 diciembre, 2005

Estas nuevas enfermedades se agregan a las 25 ya existentes, totalizando así 40 patologías que a partir del próximo año contemplará el plan.

Dentro de las nuevas coberturas destaca la depresión, en personas de 15 años y más; los accidentes cerebro vasculares, para el mismo rango etáreo; problemas de la vista en adultos mayores, y el asma bronquial moderada y severa para menores de 15 años.

El Mandatario, al dar a conocer esa información del ámbito de la salud, aprovechó la oportunidad para volver a insistir en que no da lo mismo quien gobierna, al recordar que «los parlamentarios de la Alianza por Chile apoyaron sólo algunos aspectos de dicha reforma a la salud y que, por tanto, esas son las diferencias, por eso cuando yo digo no da lo mismo quien gobierna, no da lo mismo».

Destacó que lo que «hemos hecho hoy es algo tremendamente importante; hemos demostrado la seriedad de los compromisos que asumimos, la seriedad de los compromisos que vienen por delante y estoy seguro que estas políticas van a continuar como corresponden».

Precisó que «aquí hemos hecho un tremendo cambio en la salud en Chile; este cambio es un cambio histórico y no me cabe la menor duda que el país sabe distinguir; por eso cuando he dicho que no da lo mismo quien gobierna, porque esta reforma de esta envergadura obviamente que requiere políticas basadas en valores muy claros de solidaridad y de dignidad para todos los chilenos».

40 PATOLOGIAS

Estas nuevas 15 patologías se añaden a las 25 existentes, por lo que a partir del próximo año se extenderán a 40 las enfermedades con cobertura dentro del Plan Auge, las que representarán cerca del 57 por ciento de la carga de afecciones en Chile y que implicarán un presupuesto de 450 mil millones de pesos anuales.

Entre las nuevas coberturas destaca la depresión en personas de 15 años y más; los accidentes cerebro vasculares, para el mismo rango etáreo; problemas de la vista en adultos mayores, y el asma bronquial moderada y severa, también para menores de 15 años.

Las nuevas patologías son:

Colecistectomía (extracción de vesícula) en adultos de 35 a 49 años; cáncer gástrico; cáncer de próstata; vicios de refracción en mayores de 65 años; estrabismo en menores de 9 años; retinopatía diabética; desprendimiento de retina; hemofilia; depresión en mayores de 15; hiperplasia benigna de próstata; órtesis; accidente cerebro vascular isquémico; Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC asma; y síndrome de dificultad respiratoria del recién nacido.

Santiago de Chile, 28 de diciembre 2005
Crónica Digital/Agencias , 0, 56, 3

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BALANCE DEL (D)AÑO AMBIENTAL EN CHILE

Mié Dic 28 , 2005

Sino más bien con la creciente conciencia ecológica ciudadana y la movilización de miles de personas en todo el país en demanda por cambiar el modelo económico de acumulación y una toma de conciencia política genuina y eficaz por el medio ambiente. Esta toma de conciencia no ha sido gratuita, costó la vida de cientos de cisnes, la destrucción de miles de árboles y la contaminación de kilómetros de costa. Eso sin contar a los miles de chilenos -incluidos niños- enfermos con plomo, arsénico o pesticidas. Sólo viendo la magnitud del desastre y la nula reacción del gobierno, ya sea a niveles locales o central, la ciudadanía comenzó a tomar conciencia del abandono en que se encuentra el patrimonio ecológico chileno y salió a la calle el 9 de julio en la mayor movilización nacional por el medioambiente que se haya organizado nunca en Chile. Miles de ciudadanos de Arica, Antofagasta, Copiapó, Tierra Amarilla, Vallenar, Quillota, Valparaíso, Chillán, Temuco, Concepción, Valdivia, Panguipulli, Puerto Montt y Santiago protestaron por la contaminación por plomo en Arica, los derrames de petróleo en Antofagasta, el proyecto Pascua Lama, los niños caca de El Melón, la planta La Farfana, los proyectos de nuevas plantas de celulosas, el desastre del río Cruces, y un demasiado largo etcétera. Cada comunidad tiene sus problemas específicos, pero a la vez se reconoce como parte de una voz nacional, que exige una mejor calidad de vida ambiental y un mayor respeto a nuestro patrimonio natural. Las organizaciones ambientales deben hacerse cargo de ese mandato ciudadano, y reforzar la lucha por estas reivindicaciones ambientales, que tienen por cierto una fuerte impronta social, toda vez que son los sectores más pobres los que más sufren con la iniquidad distributiva, la contaminación de sus barrios y la destrucción de sus fuentes laborales, como es el caso de los pescadores artesanales. Esta creciente sensibilidad ciudadana frente al tema ambiental, así como el rol asumido y tal vez esperado de las organizaciones ambientales, despierta apetitos electorales y políticos que nada tienen que ver con las legítimas reivindicaciones reclamadas. Ante un resultado incierto los candidatos pretender captar a cualquier costo los miles de votos indecisos, y para ello el tema ecológico constituye un gancho interesante. Esta situación conlleva tantas oportunidades como riesgos: por una parte, puede ser, por ejemplo, el momento de exigir a los candidatos reformas de fondo al modelo de acumulación, y que los grandes proyectos de inversión sean pasados por un cedazo más riguroso, bajo la óptica de un real desarrollo sustentable. Pero también está la amenaza de que algunos ambientalistas, sabedores de la ajustada coyuntura política, busquen beneficios personales y vendan la credibilidad de las organizaciones que dirigen a cambio de financiamiento o nombramientos, comprometiendo no sólo su integridad, sino la de todo el movimiento ambiental organizado, toda vez que actúan en nombre del ecologismo chileno. Esta estrategia ya se ha intentado antes, con desastrosos resultados. Cada vez que la credibilidad ambiental se compromete en acuerdos políticos, la ecología se ha visto […]