He planteado con insistencia que nuestras comunas y nuestro distrito requieren una profunda transformación. El centralismo actual, que no han querido cambiar la Concertación y derecha, carece de democracia participativa, ahoga nuestras capacidades de emprender proyectos y no ha resuelto en décadas problemas que se agudizan.Maipú, Estación Central y Cerrillos se merecen un cambio ahora.
Creo que Maipú, con urgencia, debe ser considerada una ciudad, y lo propuse y lo expuse desde que comenzó la campaña, no ahora. Una ciudad, en donde ya habitan 519 mil habitantes, no es una comuna ni puede ser tratada así.
Esto significa pelear» para que en el terreno legislativo, se establezcan las transformaciones que impliquen una nueva forma administrativa, con gobernación e intendencia mediante, yconstitución de nuevas comunas.
Pero ello sería agua en el desierto, si junto con eso no se democratiza plenamente el sistema de poder para la ciudad de Maipú.
Esto implica sistemas de elección democráticos y mayor control ciudadano sobre las autoridades elegidas.
En el terreno económico, social y político, esto implicaría un gran paso adelante.
Pero no se puede hacer todo esto, si no pensamos en cambiar el actual sistema binominal, antidemocrático y autoritario, que sostiene al actual Parlamento, y con el cual se realizan estas elecciones. Esto es muy grave.
En el foro de TVN (el único al cual asistieron mis «colegas candidatos», porque a los cuatro restantes realizados en Maipú y Estación Central, ninguno de ellos llegó) expuse esta situación: Nuestro distrito elige dos Diputados; sin embargo, un distrito de la Región metropolitana, con cien mil menos votantes, elige también dos Diputados.
Los ciudadanos de Maipú, Estación Central y Cerrillos valen menos que los de otras comunas, en términos del sagrado derecho a elegir por voto ciudadano. Sobre otras prioridades:
1) Soy enfático en señalar que, si derrotamos al narcotráfico y su poder, vamos haber cortado el oxígeno a la principal causa de la delincuencia en nuestras comunas y en Chile entero.
Esto implica, en el Parlamento, levantar el secreto bancario; permitir que lor organismos del estado puedan investigar públicamente las redes de lavado de dinero, que hoy permiten a los traficantes hacer grandes negocios en hoteles, construcción de edificios, negocios bancarios y sacar mucho dinero hacia el exterior.
Hay que tener determinación para investigar las redes de poder del narcotráfco, que hoy se ha metido también en el poder político.
Lo dije, también, en el foro de TVN: una banda de reciente vida, no más de seis meses, genera «ganancias» de 400 millones de pesos semanales, 1600 millones al mes.
Junto con esto, necesitamos un plan social focalizado a las familias en riesgo social, con el apoyo de tantos profesionales que creen en la vocación de servir.
Esto implica tener fondos y recursos, porque el tratamiento de una persona drogadicta es de a lo menos 4 millones de pesos, eso cuesta. Pero se requiere ser solidarios, ir al apoyo de las familias en riesgo, trabajar con
ellas, con mediación social, con objetivos y metas, generando su reinserción activa y ciudadana.
En nuestras tres comunas, este flagelo está matando a una parte de nuestra juventud.
2) He trabajado con médicos, salubristas, organismos de la salud; he visitado los consultorios, he escuchado atentamente a la gente de las tres comunas. Hay una gran frustración, hay una gran desesperanza, todos vuelven a repetir las mismas ofertas de ocasión. Mi propuesta tiene dos variantes:
a) Mejorar sustantivamente la atención primaria, especialmente en lo referido a horas-médico especialistas. Este es el principal problema, muchos esperan meses, y hasta años, por atención especializada, y están en las listas de espera para llegar al hospital, que también está colapsado.
b) La construcción de un HOSPITAL PUBLICO (no privado ni semi privado), que en alianza estratégica y solidaria, sea un espacio de atención para las tres comunas.
Este es un plan posible de realizar, y se requiere un plebiscito participativo, en las tres comunas, para que sea la gente la que determine la prioridad de un presupuesto participativo en relación a este específico
asunto.
Y se le llame a pelear por esta prioridad, hasta que lo logremos.
3) He conversado con dirigentes del Colegio de Profesores; se algo de educación porque soy profesor universitario en la Universidad de Santiago y en Arcis; nuestras comunas tienen un problema crítico. Hay que nivelar hacia arriba la calidad de la educación en nuestras comunas.
Se requiere una alianza con los profesores, en primer lugar, ellos mas que nadie saben que se necesita una «cirujía mayor» en la educación, con muchos más recursos humanos y materiales; con nuevos planes educativos y curriculares.
En Chile,tal como lo denunció el Cardenal Errázuriz, la escandalosa desigualdad
social se refleja en los desniveles educativos.
No puede ser que nuestros jóvenes, hoy, prácticamente no lleguen a las universidades públicas por esta razón. Esto debe cambiar, y se puede cambiar. Hay una propuesta avanzada en este sentido, en reciente audiencia pública dirigentes del Colegio de
Profesores expusieron algunos de esos trazados.
Pero no se puede castigar a los profesores con «evaluaciones docentes» que buscan la precarización de su tarea docente. Hay que mejorar el sistema educativo, integralmente.
La educación es la mejor forma de promover la movilidad social, generar de verdad condiciones para una real sociedad del conocimiento y abrir hacia arriba los niveles culturales.
La experiencia democrática de Chile así lo
demuestran, especialmente en los gobierno de Eduardo Frei y Salvador Allende. Nunca más hemos logrado los niveles educativos que se alcanzaron en el período de la Unidad Popular.
Soy parte del Juntos Podemos Más, soy dirigente nacional de esta nueva alternativa, mi programa de gobierno es el de Tomás Hirsch.
Queremos representar a Chile, no a un pedazo del país, cuando la izquierda chilena
crece, crece el pueblo y la ciudadanía. Este es mi mensaje».
Santiago de Chile, 7 de diciembre 2005
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