El Presidente Sebastián Piñera anunció este jueves el cierre del penal Cordillera, ubicado en Peñalolén donde cumplen su pena una decena de ex uniformados condenados por violaciones a los derechos humanos, como Manuel Contreras y Miguel Krassnoff.
«El Gobierno, tomando en consideración tres principios, primero la igualdad ante la ley; segundo, la seguridad de los internos; y tercero, el normal y más eficiente funcionamiento de Gendarmería, ha tomado la decisión de cerrar el centro penitenciario Cordillera», declaró.
El Jefe de Estado indicó que «se trasladará a los internos que están en ese centro y que son 10 personas, al centro penitenciario de Punta Peuco».
«De esta forma estamos satisfaciendo esos tres principios, que son principios que deben regir en todos los actos y todas las acciones del Gobierno, y que, insisto, son la igualdad ante la ley, la seguridad de los internos y el mejor y más eficiente funcionamiento de Gendarmería de Chile», añadió.
Sobre el traslado de los reos, señaló que «Gendarmería, en el momento oportuno, va a realizar los traslados que correspondan».
«El Gobierno, al tomar esta decisión, ha tomado en cuenta las disponibilidades y las capacidades del centro penitenciario Punta Peuco y ese centro tiene todas las facilidades y capacidades para recibir a los 10 recluso o internos que están hoy en el penal Cordillera», afirmó Piñera.
El penal Cordillera era parte del Comando Administrativo del Ejército (CAE) donde estaban los militares procesados por violaciones a los DD.HH.
El Mandatario había anunciado el pasado jueves 19 de septiembre tomaría una decisión respecto a la continuidad del recinto carcelario, donde aseguró que el ex director de la DINA, «es una persona que no merece, desde mi punto de vista y mi criterio, ningún aprecio, ninguna justificación, ninguna cercanía».
Razones de la medida
Previo a esto, la fiscal judicial de la Corte de Apelaciones de Santiago María Loreto Gutiérrez dio a conocer el informe de visita semestral al Penal Cordillera, donde se reveló que los diez ex uniformados condenados por violaciones a los DD.HH. se distribuyen en cinco cabañas «bien equipadas».
Estas viviendas «cuentan con servicios higiénicos, duchas, agua caliente, luz natural, buena ventilación, bien equipadas».
Además, los reos tienen acceso a radio, música, televisión, lectura, actividades deportivas y religiosas, además de «contacto permanente con sus familias».
Los criminales «se encuentran asistidos por médico, psicólogo, asistente social, tres paramédicos y un kinesiólogo. En caso de emergencia, son trasladados al Hospital Militar».
Bachelet presiona al gobierno
La candidata presidencial de la Nueva Mayoría, Michelle Bachelet, manifestó este jueves que un recinto penitenciario como el penal Cordillera no se justifica, y que si llega a La Moneda decidiría sobre el futuro de ese lugar en base a los antecedentes que tenga en sus manos.
La abanderada del bloque opositor hizo estas declaraciones en el marco de su visita al quiosco de financiamiento ciudadano de la campaña de donación “Tu Aporte Vale”, ubicado en el Parque Forestal, frente a Plaza Italia.
“Yo entiendo que esta es una situación que el Presidente Piñera está estudiando y que muchas personas efectivamente piensan que un penal de esa naturaleza no se justifica, yo creo que efectivamente ya no se justifica y que será decisión del presidente tomar la evaluación de cuál es la mejor opción a esta altura”, aseveró.
Consultada si en una eventualidad, le tocara en un futuro gobierno suyo, tomar una decisión respecto de estos recintos penitenciarios, donde se encuentran los condenados por delitos de violaciones a los derechos humanos, Bachelet respondió que “en un gobierno mío, va a depender de lo que yo me toque tener en mis manos la decisión que tome”.
Santiago 26 septiembre de 2013
Fuente Diversos Medios
Crónica Digital
El calculo politico y el pragmatismo oportunista de la candidata la hace ser mas papista que el papa. Piñera sera muy de derecha pero se atrevio a cerrar el hotel prision. La respuesta de Bachelet refleja su continua ambigüedad en materia de derechos humanos. Esta es una de las tantas ambigüedades de la candidata