Camila no se levantó. Sus compañeros de partido rindieron homenaje a Jaime Guzmán, de pie y sin grandes cuestionamientos, como lo oye, lo hizo Guillermo Teillier, Karol Cariola y Daniel Núñez, para no ser menos, desde el Partido Socialista la nieta de Salvador Allende, Maya Fernández también cumplió con el “rito republicano”.
Pero Camila no se levantó. El Presidente del Partido Comunista, ese que un par de meses atrás reivindicó el derecho de magnicidio del dictador, al avalar con su presencia un homenaje a quién se consideró a sí mismo, como el principal enemigo político de su partido, no hace otra cosa que sembrar confusión y dar una bofetada a los mártires de su colectividad. ¿Qué dirán las familias de Víctor Díaz, Marta Ugarte, Jorge Muñoz, Uldarico Donaire, Jaime Donato? A propósito ¿Ustedes creen que Gladys Marín se hubiera levantado?
Camila no se levantó. La derecha como era de esperar, piensa que la animita de su líder merece ser venerada, pero la irreverente comunista no está para mostrar devoción al Goebbels chileno, una cosa es el convencimiento republicano -y otra muy distinta- ceder a concesiones puritanas, carentes de sentido.
El gesto es doblemente valioso, se necesita valentía para enfrentar a los adversarios, pero hace falta coraje, para mantener sus convicciones, sobre todo cuando sus compañeros, tomaron una actitud diferente. Camila actuó con la sintonía social que la caracteriza, de esa forma representó a los miles de chilenos que salieron a la calle durante el año 2011, en la llamada rebelión contra el lucro y la herencia constitucional pinochetista, de la que Jaime Guzmán es el principal arquitecto. De esa sensibilidad debió hacerse cargo Camilo Ballesteros, antes de decir que “tendría que evaluar si me pongo de pie” ese tipo de dudas, titubeos o fluctuaciones, no se pueden tener en temas que ponen a prueba, los fundamentos del actuar político. La derecha tiene todo el derecho de rendir homenaje a quién estime conveniente, son los representantes de la izquierda y en especial de un partido con historia, como el comunista, los que deben delimitar con mucha claridad, sus acciones frente a estos hechos.
“Algo está pasando, algo huele mal”
Hace días atrás en el contexto del Lollapalooza, un grupo de jóvenes, tuvo la peregrina idea, de gritar a la cantante Ana Tijoux una frase para el bronce ¡Cara de nana! Como si el rostro moreno, pelo negro y pómulos prominentes, sumado a un par de ojos marrones, fueran en sí mismos motivos de vergüenza. Ese clasismo primario de contenido racista, no es nuevo en la sociedad chilena, los calificativos de “roto”; “Huacho”; “Indio” son parte del lenguaje cotidiano, de una añeja casta de aristócratas y arribistas que de vez en cuando nos recuerda, el anhelo de superioridad por mayorazgo, inteligencia, comportamiento moral y cómo no, también de talento .
En lo literario, un artículo elaborado por el director de este medio titulado “Los hijos de Pinochet o la poesía líquida de los 90” publicado en una página cuya especialidad son los temas literarios, http://letras.s5.com/ocid270314.html de modo inexplicable, desata todo tipo de ataques personales, por parte de algunos de los integrantes de dicha generación, lo llamativo, es la pretensión unipolar de carácter estético, incapaz de aceptar que coexisten otras miradas, otros juicios de valor, otras dimensiones de lo que se entiende como belleza. En este escenario, la idea de una comunidad literaria, resulta impracticable, porque lo que existen son pequeños grupos de presión, dispuestos a extraer del Estado y de las organizaciones no gubernamentales dedicadas al tema, el máximo de beneficios, excluyendo de todos los ámbitos posibles a los otros. Para quienes deseen profundizar en el intercambio, les envío este link. https://www.facebook.com/alejandra.delrio1/posts/10152315342749168?stream_ref=10
Volviendo a lo político, el proyecto de ley de rebaja de dineros destinados a la función parlamentaria, presentados por Gabriel Boric y Giorgio Jakson, ambos ex líderes del movimiento estudiantil, es una fotografía más de los niveles de desigualdad existentes en la sociedad chilena, se trata de sueldos obscenos, para la cotidianidad de los trabajadores, lo insólito son las respuestas de los propios involucrados, descalificando a sus pares, como jóvenes sin responsabilidad de familia, o sea hay padres que se las tienen que arreglar con el mínimo -y otras familias que por méritos de la democracia- merecen aportes millonarios.
Uno de los actores principales del momento, es el Partido Comunista encajando sus piezas en la nueva maquinaria de poder; y por otro lado la derecha que no termina de convencerse, de la dureza de los cambios que se aproximan.
Sin embargo, esta película trae consigo resabios de guiones antiguos, trasnochados, rescatados de viejos baúles que huelen a excremento, será “el peso de la noche” del que nos hablaba Portales, con su parloteo conservador o se tratará sencillamente de un viejo mal que nos acecha, no sé, esa exquisita necesidad de excluir, estigmatizar al otro, de someterlo por las buenas o las malas, ese pequeño hálito opresor que emana de las aulas, los cuarteles, las academias, los partidos políticos y del que no escapan los aprendices de escribidores -y por cierto- nuestra cotidianidad. Algo está pasando, algo huele mal, en la madrugada del nuevo ciclo
Santiago de Chile, 10 de abril 2014
Por Omar Cid
Director de Crónica Digital.
El Partido Comunista ya aclaró que los parlamentarios no rendían ningún homenaje.
Por supuesto, habría sido mejor una conducta pareja. Pero seguir vapuleando a los dirigentes del PC por este episodio es hacer sospechar que el propósito no es una crítica fraternal. La pregunta que se podría plantear es: Se merece la dirección del PC que se recurra a cualquier descoordinación para inflamar antagonismos inexistentes? Personalmente, no lo pienso así.
Por otra parte, lo curioso es constatar que no se exige la misma rigurosidad a los demás parlamentarios de Nueva Mayoría, ni a autoridades del nuevo gobierno. Tampoco a ciudadanos comunes y corrientes que han tenido que sumarse, en más de alguna ocasión, a homenajes, a criminales de la misma calaña y jauría de Guzmán, en eventos municipales, escolares, militares, etc..
Lo que tiene real importancia, en la conducta de los parlamentarios comunistas, es en las votaciones de los proyectos que se discutan en el Congreso. Aquí, si es por pedir ecuanimidad, lo único que cabría es el justo reconocimiento de la conducta impecable de la bancada comunista.
Hola Omar. Estimado compañero, he leído tu nota me parece muy interesante y comparto el contenido de fondo. No sé si leiste un comentario Cuando lo de Camila, el comentario es más o menos así » Dicen que sin teoria revolucionaria no hay practica revolucionaria. Tambien podria decirse viceversa, que sin practica revolucionaria no hay teoria revolucionaria. Camila ha sido consecuente con ambas» Personalmente yo militante comunista con casi 50 años de militancia. Jamás , y bajo ninguna circunstancia, bajo ningún contexto historico. político- social, me pondría de pie. Y no estoy hablando de homenajé!! sino que no me levantaria ni me pondria de pie. No guardo llevo odio en el alma, no guardo perdon, pero soy de los que gritan desde el alma Ni olvido ni perdón!!!.
Leí la nota de Alfredo titulado “Los hijos de Pinochet o la poesía líquida de los 90” Me pareció un trabajo serio, con bastante elementos de análisis y muchas Fuentes de investigación. No sé qué tipo de reacción y comentarios provocó.. Sería interesante que tú o Alfredo me contaran eso, en un mensaje por el privado.
Un gran abrazo estimado Amigo y compañero.
Fe de errate. Donde Dice: No guardo llevo odio en el alma, no guardo perdon, pero soy de los que gritan desde el alma Ni olvido ni perdón. Léase. No llevo odio en el alma, no guardo rencor, pero soy de los que gritan desde el alma , Ni olvido ni perdón.
Nota. Omar es muy raro que el texto salió tan mal redactado , incoherente y fuera de contexto. Estoy seguro que lo escribí tal como lo he redactado en fe de errata. Atención a eso, pues es raro, muy raro