Lo que ha hecho el Tribunal Constitucional es tomar nota y acoger a tramitación la presentación de Cardemil, es un procedimiento ordinario. Yo estoy tranquilo y confiado y creo que hay personas honorables en el tribunal y deberá procederse a su evaluación, dijo Navarro.
A su juicio el artículo 60 de la Constitución no ha sido infringido como señala Cardemil, pero también considero que es un artículo que hay que eliminar de la Constitución. Esta es la única Constitución política del mundo que mantiene esta restricción para los parlamentarios. NO existe ningún lugar que prohíbe que los parlamentarios puedan representar los intereses, marchar, demandar y movilizarse junto a quienes los eligen. Pretender alejar a los parlamentarios de la ciudadanía va en el sentido contrario de la democracia.
Precisó que esperaba que esto se resuelva en los plazos fijados por el tribunal y mientras tanto seguiremos representando y defendiendo los derechos de la gente en cualquier lugar y bajo cualquier condición. Para eso me eligieron y yo debo responder a mis electores, al mandato soberano de representar en el Senado a los trabajadores y ciudadanos y para eso ninguna acción política, ningún señor Cardemil me lo va a impedir.
Navarro dijo que esto nos va a permitir debatir sobre el fondo del artículo 60, sobre el trasfondo autoritario que tiene aún la Constitución del 80 que va en contra del sentido que la ciudadanía le exige a la política. Va a permitir un debate de fondo sobre lo que yo estoy convencido, de que Chile requiere una nueva Constitución y de que tiene que haber una asamblea constituyente, porque jamás en las más de 12 veces que Chile ha tenido Constitución, nunca los ciudadanos han tenido posibilidad de discutirla.
Aseveró que en su convencimiento ni siquiera he infringido el artículo 60 que se parece mucho al artículo octavo que impidió la vida política de Clodomiro Almeyda. El artículo 60 es lo que quedó como resabio del artículo octavo de la Constitución que eliminamos y el siguiente paso es eliminar este artículo. Aún así no existe una relación directa, pues no había huelga, no había negociación colectiva, no había empresa, era una marcha política en demanda de un nuevo modelo económico y un sueldo ético que lo pidió incluso la Iglesia Católica.
Por último, dijo que la actitud del diputado Cardemil es una actitud autoritaria y ojala fuera a la ex Birmania, yo creo que se sentiría muy cómodo como ministro del Interior y allá lo recibirían con los brazos abiertos.
Santiago de Chile, 10 de octubre 2007
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