El portavoz del Comité de Investigaciones de Rusia, Vladimir Markin, afirmó que existen pruebas indiscutibles de que la Guardia Nacional ucraniana y extremistas de Sector Derecho son culpables de las fosas comunes descubiertas en el sureste.
Uno de los militantes del batallón ucraniano Dnepr, Serguei Litvinov, actualmente bajo arresto en Rusia, reconoció haber asesinado a civiles que no participaban en el conflicto armado, mujeres y niños entre ellos, informó Markin.
Litvinov admitió que recibía remuneración financiera de los recursos desembolsados por el oligarca Igor Kolomoiski, gobernador de la provincia de Dnepropetrovsk, designado por Kiev tras el derrocamiento del presidente Víktor Yanukóvich el 22 de febrero último.
Banquero, magnate petrolero y de la industria de armamentos en Ucrania, Kolomoiski es señalado por la revista Forbes como el dueño de la tercera mayor fortuna de ese país, y financia personalmente los batallones de la Guardia Nacional y los escuadrones de Sector Derecho que operan en el sureste.
El vocero del Comité de Investigaciones informó que se ha llevado a cabo una pesquisa sin precedentes con más de 60 mil interrogados de entre los 300 mil refugiados acogidos en Rusia.
Más de 12 mil de ellos son considerados víctimas de diferentes tipos de crímenes en el este de Ucrania (Donbass), precisó, al subrayar que esos datos sirven de fundamento al expediente penal abierto sobre «el genocidio de la población ruso parlante en Ucrania».
La televisión mostró imágenes de la búsqueda que realizan los milicianos en fosas comunes junto a los órganos de instrucción de Donetsk y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
En esos túmulos ubicados en zonas que antes estuvieron ocupadas por las tropas al servicio de Kiev, ya fueron hallados 400 cadáveres, de los que 350 corresponden a civiles ajenos a los combates y con muestras de haber sido rematados.
Rusia no puede permitir que los crímenes cometidos en el sureste de Ucrania permanezcan impunes, declaró, por su parte, el comisionado para los Derechos Humanos, la Democracia y la Supremacía de la Ley de la cancillería, Konstantin Dolgov.
Al referirse a los cientos de civiles asesinados y encontrados en las fosas cerca de Donetsk, Dolgov subrayó que confrontaron esa información con la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
Muchos de ellos fueron rematados con tiros en la cabeza, enfatizó al aclarar que las zonas donde esos túmulos fueron hallados habían estado bajo control de la Guardia Nacional ucraniana en los momentos en que se cometieron los crímenes, según los forenses y testigos.
Moscú, 2 de octubre 2014
Crónica Digital / PL