La Conmebol sancionó ayer con tres partidos de suspensión al zaguero chileno Gonzalo Jara, autor de un detestable incidente contra el uruguayo Edinson Cavani en los cuartos de final de la Copa América de fútbol.
Jara sacó barato el castigo, muchos especialistas presagiaban hasta ocho encuentros alejado de la Roja, aunque con la sanción de la Confederación Sudamericana el defensor quedó marginado definitivamente del torneo.
Durante el duelo Chile-Uruguay, Jara le metió el dedo en el trasero a Cavani, una imagen que recorrió el mundo y recibió reproches de todos tipos y colores por su vulgaridad y descaro desmedidos.
Cavani reaccionó a esa injuria (y a otras verbales, graves igual) y lanzó un golpe que apenas rozó el rostro de Jara, quien se lanzó al suelo y fingió una obra de teatro colosal, como si hubiera recibido un recto de derecha del mismísimo Muhammad Ali.
El árbitro brasileño Sandro Ricci y sus asistentes hicieron gala de una ineptitud exagerada y Cavani -la víctima a los ojos del mundo- se ganó la segunda amarilla, hecho que desequilibró totalmente el partido, finalmente ganado 1-0 por los anfitriones de Chile.
En fin, Jara quedó imposibilitado de jugar la semifinal contra Perú y una presunta final contra el ganador del duelo Argentina-Paraguay, además del primer partido de la Roja de América en las eliminatorias al Mundial de Rusia-2018.
Santiago de Chile, 29 de junio 2015
Crónica Digital / PL