Argentina es un ir y venir hoy de aeronaves y embarcaciones de fuerzas especiales de 13 países que trabajan a contrarreloj para dar con el paradero del submarino y los 44 tripulantes que viajaban a bordo. Hasta ahora nada se sabe y sus familiares ya perdieron la esperanza de encontrarlos vivos.
No hay fecha para que termine esta tarea de búsqueda y rescate, aclaró en uno de los últimos comunicados el vocero de la Armada, Enrique Balbi, quien desmintió a la prensa que la nave estuviera cumpliendo alguna ‘misión secreta’ cuando se produjo la explosión confirmada ayer.
Los ojos están puestos en las aguas del Atlántico Sur donde distintas embarcaciones trabajan sin descanso día y noche.
La víspera, el presidente, Mauricio Macri, salió a hablar públicamente por primera vez desde que se supo de la tragedia del San Juan y señaló que los hechos requerirán una investigación seria y profunda que arroje certezas de lo que pudo haber sucedido al tiempo que pidió no aventurarse a buscar responsables.
Mi primer pedido a todos es que trascurramos este momento y los próximos días con el máximo de respeto por el dolor que esto ha generado y a los familiares estoy acá para garantizarles que vamos a continuar con la búsqueda especialmente ahora que contamos con el apoyo de toda la comunidad internacional y todos los avances tecnológicos disponibles, dijo.
Buenos Aires, 25 de noviembre 2017
Crónica Digital /PL