El cientista político y académico de la Universidad de Santiago de Chile, Dr. Bernardo Navarrete, asegura que debido a la falta de parlamentarios de Chile Vamos para alcanzar mayorías simples en ambas cámaras, las iniciativas de la administración del Presidente electo Sebastián Piñera dependerán de que congresistas de la falange adhieran a sus propuestas. En ese sentido, estima que “la mejor estrategia para la Democracia Cristiana es salirse de la Nueva Mayoría, porque ya no es un pacto electoral ni de Gobierno”.
Sebastián Piñera resultó electo Presidente de la República tras imponerse a su contendor del oficialismo, Alejandro Guillier, con un 54,58% frente al 45,42%. Sin embargo, para enviar proyectos de ley y que estos alcancen la mayoría simple en la Cámara de Diputados, se requieren 78 votos, y los parlamentarios de Chile Vamos solo son 72. Mientras, en el Senado, para alcanzar mayoría simple se requieren 22 adhesiones, pero el bloque de derecha solo cuenta con 19 congresistas.
En ese cuadro, el analista político y académico de la Universidad de Santiago de Chile, Dr. Bernardo Navarrete, sostiene que la Democracia Cristiana jugará un papel decisivo para aprobar las iniciativas que presente al Congreso la próxima administración. “Lo esperable es que algunos parlamentarios DC crucen el río y voten algunas de las propuestas de proyectos de ley de Piñera”, afirma.
Para el Dr. Navarrete, esto es esperable pues el bloque oficialista se encuentra en muy mal pie tras la derrota del senador en las recientes presidenciales. “En todos los partidos que están en la centroizquierda, el orden no se va a producir, primero porque el concepto de Nueva Mayoría es líquido. Es decir, actualmente, esa coalición no es nada y, probablemente, la mejor estrategia para la DC es salirse de ese acuerdo, porque ya no es un pacto electoral ni de Gobierno”, sostiene.
Actualmente, la lista donde se encuentra la falange, Convergencia Democrática, cuenta con 14 diputados y 6 senadores. “Aquí lo clave es quién va a ser el Ministro Secretario General de la Presidencia, que va a tener que negociar con esa disparidad que se va a producir desde el centro hacia la izquierda”, estima.
En ese sentido, el académico estima que la mejor decisión para Piñera sería reeditar el nombramiento de Cristián Larroulet en la Segpres. “Tiene un gran nivel de pragmatismo, manejo y consistencia que es relevante en este tema”, sostiene.
Causas de la victoria de Piñera
Para el Dr. Navarrete, la victoria de Piñera se debe, principalmente, a dos factores. El primero, la habilidad del comando del Presidente electo por captar temas de importancia para el elector promedio de clase media, como el empleo o la delincuencia. En este aspecto, considera que el discurso de Guillier no logró “sintonizar con la realidad”.
“Lo que se acaba de demostrar finalmente es que las clasificaciones de derecha e izquierda son del todo inútiles, porque el electorado que se moviliza considera bastante poco práctico ubicarse en uno de esos polos”, explica. “Nueve puntos de diferencia marcan un punto de inflexión, en el sentido de que este triunfo dependió exclusivamente de la derecha”, agrega.
Finalmente, un segundo factor, considera el Dr. Navarrete, es que el Frente Amplio no dio una señal clara en favor del candidato de La Fuerza de La Mayoría.
“Para un ciudadano común y corriente, el lenguaje del FA era de una contradicción absoluta. Decían: ‘no me gusta Guillier, pero tampoco Piñera”, sostiene. “En esas lógicas dubitativas, la pregunta es a quién le estaban hablando. No se puede, días antes de la elección, plantear apoyo y desapoyo. Fue poco preciso”, complementa.
Santiago de Chile, 19 de diciembre 2017
Crónica Digital / usach.cl
Los politólogos deben inventar cuentos para justificar su pega y siendo «derechoso» proponer su futuro.